La Guardia Civil mantiene acordonada la zona del suceso

Cuatro d¨ªas despu¨¦s del tr¨¢gico accidente de Avianca, ocurrido la madrugada del pasado domingo en las inmediaciones de la localidad madrile?a de Mejorada del Campo, el lugar del siniestro ofrece un aspecto desolador.Los restos del avi¨®n, esparcidos alrededor de un kil¨®metro cuadrado, ferman un enorme amasijo de hierros, ropas y pl¨¢sticos. La zona se encuentra permanentemente acordonada por fuerzas de la Guardia Civil y el acceso al lugar est¨¢ prohibido.

El juez de instrucci¨®n n¨²mero dos de Alcal¨¢ de Henares, encargado del caso, ser¨¢ el que determine lo que se hace con los restos del avi¨®n.

Mantas, ropas, zapatos y souvenirs se mezclan entre los trozos partidos del avi¨®n. Las dos turbinas, la cola, el tren de aterrizaje y las alas se encuentran esparcidos en la hondonada donde se produjo el accidente y desde donde se divisan perfectamente los primeros bloques de casas, pertenecientes al t¨¦rmino de Mejorada.

Curiosos

Una docena de curiosos merodeaban a mediod¨ªa de ayer por las inmediaciones de la hondonada, divisando de lejos los restos que quedan del avi¨®n accidentado.No se han realizado actos de pillaje, seg¨²n informaron ayer miembros de la Guardia Civil que prestaban servicio en el lugar del siniestro. Desde los primeros momentos despu¨¦s de ocurrido el accidente, la zona fue acordonada con el fin de evitar este tipo de actos.

Un miembro de la comisi¨®n investigadora del accidente, que se encontraba inspeccionando restos del aparato, se neg¨® a hacer declaraci¨®n alguna.

El ¨²ltimo cad¨¢ver

Despu¨¦s de dos d¨ªas y medio de b¨²squeda de cad¨¢veres, el martes, a las 14.30 horas se dio oficialmente por concluida la operaci¨®n, tras levantar con gr¨²as los restos del avi¨®n, donde se supon¨ªa que se encontraba el ¨²ltimo cad¨¢ver, de acuerdo con el recuento de v¨ªctimas y pasajeros. Sin embargo, el cad¨¢ver no fue hallado.La explicaci¨®n dada por el jefe provincial de Protecci¨®n Civil es que los restos calcinados de un pasajero se desintegraron, poco despu¨¦s de que se estrellara el avi¨®n, a consecuencia de la presi¨®n del chorro de los extintores que se utilizaron para sofocar el incendio producido.

Esto fue presenciado por dos miembros de la asociaci¨®n de ayuda en carretera DYA (Detente y Ayuda), que llegaron al lugar del suceso momentos despu¨¦s de ocurrido ¨¦ste. Los datos han sido presentados al juez encargado del asunto. El cad¨¢ver se da oficialmente por desaparecido.