El Supremo absuelve a los dirigentes de HB de injurias al Rey y les condena por des¨®rdenes
La Sala Segunda del Tribunal Supremo ha considerado que los incidentes ocurridos en la Casa de Juntas de Guernica con motivo de la visita del Rey, el 4 de febrero de 1981, constituyeron un delito de des¨®rdenes p¨²blicos, y ha condenado a 16 de los 17 dirigentes de Herri Batasuna procesados a penas de tres meses de arresto y multa de 20.000 pesetas. Jos¨¦ Luis Cereceda ha sido condenado a cinco meses y multa ole 50.000 pesetas por el mismo delito con la agravante de reiteraci¨®n. El alto tribunal ha absuelto a todos los procesados del delito de injurias al jefe del Estado por el que estaban acusados.
Como consecuencia de la sentencia, y seg¨²n manifest¨® a EL PA?S el presidente del tribunal, Fernarido D¨ªaz Palos, ¨²nicamente Cereceda tendr¨¢ que ingresar en prisi¨®n por haber sido condenado anteriormente por delitos de terrorismo. A los restantes, incluido el ex senador Miguel Castells, que ha sido condenado recientemente a un a?o por injurias graves al Gobierno, les ser¨¢ aplicada la condena condicional, que deja en suspenso la aplicaci¨®n de la pena.La sentencia declara probado que "el 4 de febrero de 1981 se celebraba en la Casa de Juntas de Guernica un acto solemne con motivo,de la primera visita que hac¨ªan al Pa¨ªs Vasco los Reyes de Espa?a. ( ... ) Apenas el Monarca hab¨ªa pronunciado las primeras palabras de su alocuci¨®n, miembros de la coalici¨®n Herri Batasuna, y en menor n¨²mero de la facci¨®n pol¨ªtica LAIA, ( ... ) prorruiripieron a cantar, pu?o en alto, el himno del guerreiro vasco, conocido en lengua vern¨¢cula como Eusko gudariak, conducta y actitud impropias del acto que ten¨ªa lugar, que ( ... ) provoc¨®, como era de esperar, la consiguiente repulsa de gran parte de los dem¨¢s asistentes, que con aplausos y gritos de 'fuera, fuera trataron de acallar a los que de tan ins¨®lita manera se manifestaban".
El Supremo considera que la actitud de los dirigentes de HB "coloc¨® al Monarca en una situaci¨®n al menos desairada ( ... ) siquiera el estoicismo, no exento de humor, de que hizo gala el Monarca, pudiera parecer que minimizaba el incidente". La sala, sin embargo, "no puede aseverar con la contundencia probatoria que ser¨ªa menester que el ¨¢nimo y prop¨®sito de los procesados, con su acto de interrupci¨®n del discurso de S. M., estaba dirigido a ofender el honor de la persona regia", y en la duda resuelve a favor de los reos.
El Tribunal considera que existieron des¨®rdenes p¨²blicos, ya que se "produjo un cierto tumulto y en todo caso una grave perturbaci¨®n del orden que hasta entonces hab¨ªa reinado".
"Impresentable chapuza"
De "impresentable chapuza jur¨ªdica" calific¨® la sentencia del Tribunal Supremo Jon Id¨ªgoras, uno de los procesados y portavoz habitual de HB, coalici¨®n que recurrir¨¢ ante el Tribunal Constitucional y ante el Tribunal Internacional de Estrasburgo para que de una vez por todas quede clara la necesidad de sustituir una justicia heredada del pasado por una justicia verdaderamente dernocr¨¢tica", informa desde Bilbao Patxo Unzueta.Roberto Lertxundi, portavoz de Euskadiko Ezkerra, se felicita "de que haya triunfado el sentido com¨²n y de que, al menos por una vez, no haya aumentado ni el martirologio ni las m¨¢s cerradas posiciones represivas". Por lo dem¨¢s, esta sentencia "ridiculiza a quienes hablaron de juicio a Euskadi o compararon esto con el proceso de Burgos".
Ana Miranda, de la ejecutiva del PSE-PSOE, se limit¨® a reiterar el acatamiento y respeto de su partido a toda sentencia de los tribunales. Florencio Ar¨®stegui, de Alianza Popular, destac¨® "la importancia de un pronunciamiento judicial contra quienes hacen imposible la convivencia". El PNV prefiri¨® no pronunciarse.
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