Retratos
Diecis¨¦is pintores han presentado en una galer¨ªa de Barcelona el retrato de una misma mujer. A su lado han expuesto tambi¨¦n sus diecis¨¦is autorretratos. Por la sala circulan la modelo, que es promotora de la exposici¨®n, y los pintores. En apariencia se trata de una exhibici¨®n de pinturas sobre la pared que los inocentes, visitantes contemplan. Sin embargo, ambulan por all¨ª diecisiete personajes, modelo y pintores, no eximidos de la pintura. Los artistas lo est¨¢n como autores de las respectivas obras, retratos y autorretratos, y, como modelos de las obras, en los retratos propios. Tambi¨¦n, por otra parte, como grupo de pintores que compiten como int¨¦rpretes de una modelo en diecis¨¦is referencias distintas, adem¨¢s de con su rostro presente, numeroso y ambulante, que deniega o concluye las estampas. Ella en pasivo y en activo. Objeto del cuadro, es a la vez mirada desde el cuadro como un objeto. Pero ella es de otra parte el sujeto que fermenta la exposici¨®n desde su centro. Juzga y se juzga mejor o peor tratada por la mirada del artista, pero tambi¨¦n en su juicio se interfieren o batallan las preferencias por s¨ª como sujeto y las del cuadro -ella misma- como objeto.En la sucesi¨®n de cuadros, directos y reflejos, hay un cat¨¢logo de halagos o de injurias. Una vacilaci¨®n interminable. Todo es un cataclismo del que su rostro es presa pero en el que, a la vez, los autores, en el autorretrato, se delatan como nuevas v¨ªctimas y objetos. Y puede suceder, en este universo, que mientras la mirada del artista sobre la modelo no sea propicia, lo sea la mirada del cuadro, de manera que la sinton¨ªa y el amor, cuadro a cuadro y retrato frente a autorretrato, sea mayor que la de cuadro a modelo y de modelo a modelo. De ah¨ª que ella observe los autorretratos de los artistas enso?ada. Acaso como inexistente o como demiurga. Los artistas son, gracias a ella, otra cosa que su retrato, pero son tambi¨¦n necesariamente ese retrato. De otro lado, ella est¨¢ inscrita en el autorretrato, pero, paralelamente, como retrato que define a los artistas, est¨¢ presente como un autorretrato en el retrato. En verdad, no se acabar¨ªa el juego jam¨¢s. S¨®lo la especie humana logra estos laberintos infinitos. C¨®mo no pedir que no nos maten.
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