Al jefe del Estado sovi¨¦tico, Yuri Andropov, s¨®lo le quedan dos a?os de vida, dice 'Newsweek'

El jefe del Estado sovi¨¦tico y secretario general del Partido Comunista de la URSS (PCUS), Yuri Andropov, padece una nefropat¨ªa diab¨¦tica y los m¨¦dicos no le dan m¨¢s de dos a?os de vida, seg¨²n una autoridad m¨¦dica an¨®nima que cita el semanario norteamericano Newsweek en su ¨²ltimo n¨²mero.

Yuri Andropov, seg¨²n esta fuente, est¨¢ en un sanatorio de Kuntsevo, en las afueras de Mosc¨², reservado a los miembros del Comit¨¦ Central del PCUS. El n¨²mero uno sovi¨¦tico convalece en este lugar, de una larga crisis en su salud, provocada por una nefritis diab¨¦tica, enfermedad renal incurable.Siempre seg¨²n la fuente citada por Newsweek, Andropov est¨¢ en una forma f¨ªsica relativamente buena y puede desplazarse, pero sus m¨¦dicos prefieren que retrase a¨²n un poco la reincorporaci¨®n a sus funciones. No obstante, esperan que pueda asistir a la sesi¨®n del Soviet Supremo prevista para el pr¨®ximo d¨ªa 28.

El tratamiento que sigue Yuri Andropov, se?ala Newsweek, se realiza a base de di¨¢lisis que filtran su sangre, funci¨®n que sus enfermos ri?ones no pueden hacer ya, y per¨ªodos de reposo.

Alguno de los m¨¦dicos que lo cuidan son partidarios de efectuar un trasplante de ri?¨®n, opini¨®n que no comparten otros facultativos por temor a que el m¨¢ximo dirigente sovi¨¦tico no aguante tal intervenci¨®n y se les quede en la mesa de operaciones.

El jefe del Estado sovi¨¦tico, aunque sea capaz de reanudar en breve su trabajo, puede sufrir otros ataques renales que le obliguen a nuevos par¨¦ntesis en su vida pol¨ªtica. "A menos que se encuentre un nuevo y radical tratamiento", concluye Newsweek, "la esperanza de vida de Yuri Andropov no alcanza los dos a?os".

Informaciones procedentes de Washington aseguraron hace dos semanas que miembros de embajadas occidentales en Mosc¨² hab¨ªan divisado al dirigente sovi¨¦tico mientras se dirig¨ªa al Kremlin, pero diplom¨¢ticos norteamericanos en Mosc¨² aseguraron hace cuatro d¨ªas que no contaban con pruebas suficientes para demostrarlo. Un alto representante del partido comunista, Leonidas Zamiatin, afirm¨® la pasada semana, en una conferencia de prensa, que Andropov se estaba recuperando y hab¨ªa vuelto a su despacho.