El Museo del Prado propone el aprendizaje de la pintura a trav¨¦s de la imagen infantil
El Museo del Prado, con una exposici¨®n de corte inhabitual, ha abierto sus puertas desde ayer a un nuevo tipo de p¨²blico, el de los ni?os, proponi¨¦ndole un modo de iniciaci¨®n al inter¨¦s por la pintura a trav¨¦s de su propia imagen. La muestra El ni?o en el Museo del Prado propone, a trav¨¦s de un considerable n¨²mero de lienzos, un recorrido por el tema de la imagen del ni?o en la pintura desde rinales del siglo XV hasta el siglo XIX.
La exposici¨®n El ni?o en el Museo del Prado fue inaugurada ayer por el ministro de Cultura, Javier Solana, y en la misma figuran 114 cuadros, pertenecientes a los fondos del propio museo. Por m¨¢s que el tema de esta exposici¨®n, el p¨²blico al que va en principio dirigida y la intenci¨®n que la anima pudieran inducir a pensar que se trata de una experiencix menor dentro de la pol¨ªtica de exposiciones que viene manteniendo en estos ¨²ltimos tiempos nuestra principal pinacoteca, eso no es del todo cierto.Organizada con los propios fondos del Prado, se re¨²nen aqu¨ª, junto a aquellas obras maestras relacionadas con la iconograf¨ªa infantil (Don Garc¨ªa de M¨¦dicis, del Bronzino; La Infanta Isabel Clara Eugenia, de S¨¢nchez Coello; La Infanta Margarita y El Pr¨ªncipe Baltasar Carlos, de Vel¨¢zquez; La Virgen de la rosa, de Rafael; El joven entre la virtud y el vicio, de Bern¨¦s; David vencedor de Goliat, de Caravaggio; El descanso de la huida a Egipto, de Rubens; Santa Ana y la Virgen, y El buen pastor, de Murillo, o los diversos cartones para tapices de Goya), otras muchas de acceso m¨¢s dif¨ªcil, con frecuencia de segundo orden, pero con notables atractivos y puntos de inter¨¦s.
Aun cuando, como hemos apuntado ya, no se trata de una exposici¨®n orientada por una intenci¨®n hist¨®rico-cr¨ªtica, el buen aficionado encontrar¨¢ aqu¨ª numerosos puntos de atracci¨®n, tanto por las obras mismas, c¨¦lebres o menores, como por la posibilidad de atender a la propia evoluci¨®n de la representaci¨®n infantil. En este sentido, los organizadores de la muestra han tenido el acierto de dedicar una atenci¨®n mayor al tema del retrato frente a los temas de car¨¢cter mitol¨®gico o religioso.
Mas aunque el aficionado pueda acceder con agrado a esta muestra, su verdadero protagonista, su destinatario, es, por supuesto, el propio ni?o. Con vocaci¨®n did¨¢ctica, este proyecto busca fomentar la afici¨®n en el p¨²blico infantil, y le propone aprender a mirar la pintura a trav¨¦s de ese tema que le es particularmente pr¨®ximo: el de su propia representaci¨®n y la de su mundo.
Visitas did¨¢cticas
En relaci¨®n con esa voluntad de iniciaci¨®n, se han organizado visitas diarias con monitores para aquellos ni?os que no acudan en compa?¨ªa de adultos. Durante este per¨ªodo vacacional, estas visitas en grupo ser¨¢n organizadas en el propio museo y, cuando recomience el curso, deber¨¢n ser solicitadas por los propios colegios. Asimismo, el gabinete did¨¢ctico del museo ha editado un folleto-cuestionario que, a modo de juego, permite la iniciaci¨®n del ni?o a la lectura de las obras y de su contexto.La exposici¨®n, abierta al p¨²blico hasta finales de enero, que en una versi¨®n reducida recorrer¨¢ posteriormente diversas capitales espa?olas, ha sido organizada en colaboraci¨®n con Juvenalia y patrocinada por El Corte Ingl¨¦s, siguiendo esa nueva actitud del Prado, que busca, en la cooperaci¨®n con la iniciativa privada, una ayuda que complemente la de la propia Administraci¨®n y que posibilite una mayor agilidad en la gesti¨®n de actividades culturales
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