Iber, un eterno campe¨®n del balonmano femenino

El domingo, 15 de enero, se reanuda el Campeonato Nacional de Liga en la divisi¨®n de honor femenina de balonmano. Un a?o m¨¢s, la competici¨®n, que qued¨® interrumpida el 20 de noviembre por la participaci¨®n de la selecci¨®n nacional en el Campeonato Mundial B, tiene al Iber como equipo favorito. Cinco campeonatos de Liga ganados consecutivamente, as¨ª como las tres ¨²ltimas copas de la Reina hablan por s¨ª solos. La diferencia entre el Iber y la selecci¨®n nacional es el color de la camiseta. Hasta la entrenadora es la misma.

El Siete Cacerola, nombre con el que se le conoce al club valenciano Iber, es el equipo ante el cual todos los dem¨¢s no ganaron un solo partido. Adem¨¢s se trata de uno de los pocos clubes deportivos femeninos que no tienen problemas econ¨®micos, gracias a una empresa valenciana que se dedica a la fabricaci¨®n de cacerolas de cocina. Ram¨®n Cervera es el presidente del club y a la vez el director comercial de la firma publicitaria.Ram¨®n Cervera nunca hab¨ªa so?ado que el primer mill¨®n de pesetas que gast¨® su empresa para que las jugadoras de dos clubes, el Medina de Valencia y el Furukawa, siguiesen jugando ser¨ªa el comienzo de una larga serie de aciertos.

El presupuesto para la temporada actual es de 12 millones de pesetas, si bien habr¨¢ que a?adir el coste de la organizaci¨®n del Trofeo de SS AA RR do?a Elena y do?a Cristina, en el que participar¨¢n los mejores equipos del mundo. Sobre medio mill¨®n de pesetas costar¨¢ llevar a Valencia al Radnicki yugoslavo, al CSKA de Sof¨ªa y el campe¨®n de la Uni¨®n Sovi¨¦tica. Los dos primeros apearon al Iber en la Copa de Europa de la pasada y presente temporada, respectivamente.

El campe¨®n de campeones no dispone de cancha propia. Abonan mensualmente algo m¨¢s de 25.000 pesetas por las sesiones de entrenamientos (tres semanales). Por los partidos se paga el 50% de la taquilla. El arbitraje suele costar entre 22 y 24.000 pesetas, y las recaudaciones oscilan entre 12.000 y 15.000 pesetas por partido. La recaudaci¨®n r¨¦cord se estableci¨® en el ¨²ltimo encuentro de la Copa de Europa frente al CSKA de Sof¨ªa, y ascendi¨® a 206.000 pesetas; en aquella ocasi¨®n, el Pabell¨®n San Fernando ingres¨® el 25% y los desplazamientos y derechos de arbitraje costaron 130.000 pesetas. Para fomentar la afici¨®n el club reparte cientos de entradas entre los colegios.

lber, igual a selecci¨®n

Media docena de jugadoras y la entrenadora del Iber, Cristina Mayo, formaron recientemente en las filas del equipo nacional que en el Campeonato del Mundo B qued¨® clasificada en pen¨²ltima posici¨®n, de 12 pa¨ªses. "Estarnos creando subnormales f¨ªsicos", explica la jugadora Concha de Pinedo, internacional en 57 ocasiones. "Lo primero, para m¨¢s tarde adquirir cierto nivel", a?ade, "es que todos los ni?os tengan una educaci¨®n f¨ªsica correcta; de la misma manera que se les alfabetiza. Si en otros pa¨ªses, la selecci¨®n se hace sobre 200 jugadoras de calidad, aqu¨ª se hace partiendo de 25 o 30 de una calidad media". De Pinedo es tajante en su conclusi¨®n; "Mientras no haya una planificaci¨®n multitudinaria de la educaci¨®n f¨ªsica y ¨¦sta se lleve a cabo, no vamos ¨¢ llegar a ning¨²n sitio".La mayor¨ªa de las jugadoras son monitores o licenciadas del INEF y trabajan como tales en la Fundaci¨® Municipal d'Esports de Valencia o en colegios. Adem¨¢s, la jugadora Nanda Konincks ejerce como abogada en Gand¨ªa, y Rosa Mu?oz es doctora en Qu¨ªmica Industrial. Nadie vive del balonmano, y las jugadoras llegadas de fuera de Valencia, poco m¨¢s de la mitad pueden cobrar mensualidades de 25.000 o 30.000 pesetas.

Cristina Mayo no cree que el Iber sea un caso excepcional: "No nadamos en la abundacia. El Iber es un club con un buen presidente, que ha creado una infraestructura v¨¢lida y un grupo de trabajo. S¨ª es cierto que, a diferencia de los dem¨¢s clubes, no tenemos problemas econ¨®micos".