Castraci¨®n qu¨ªmica para un multimillonario norteamericano violador de su hijastra
Uno de los herederos de un imperio farmac¨¦utico internacional fue condenado ayer a la castraci¨®n qu¨ªmica por el delito de violaci¨®n de su hijastra durante siete a?os. La sentencia fue pronunciada por el juez del condado de Kalamazoo (Michigan), Robert Borsos, contra Roger Gauntlett, bisnieto de W. E. Upjohn, el fundador de uno de los laboratorios m¨¢s importantes de Estados Unidos.
La condena, cuya apelaci¨®n va a ser planteada por los abogados del acusado, consistir¨¢ en la aplicaci¨®n peri¨®dica durante cinco a?os del f¨¢rmaco Devo Provera, un producto que inhibe temporalmente el apetito sexual en los varones y se emplea experimentalmente como anticonceptivo.Parad¨®jicamente, la droga es fabricada por los laboratorios Upjohn, fundados en 1866, cuya sede central est¨¢ en Kalamazoo, con filiales en varios pa¨ªses.
A Gauntlett, seg¨²n la decisi¨®n del juez, se le aplicar¨¢ la droga castradora como sanci¨®n por la violaci¨®n de su hijastra de 14 a?os, de la que abus¨® sexualmente entre 1974 y,1981. El condenado, adem¨¢s, permanecer¨¢ un a?o en prisi¨®n y deber¨¢ pagar las costas judiciales, cifradas en m¨¢s de cuatro millones de pesetas.
Durante el juicio qued¨® establecido que Robert Gauntlett, de 41 a?os, forz¨® a la menor desde que ¨¦sta ten¨ªa siete a?os hasta que huy¨®, en 1981, para irse a vivir con su padre.
La castraci¨®n como castigo para los delitos sexuales est¨¢ reconocida por las leyes norteamericanas en varios de sus Estados, aunque su aplicaci¨®n es motivo de permanente pol¨¦mica. En algunos casos, los jueces ordenan la castraci¨®n quir¨²rgica de los reos, mientras que en otros se apela al uso de drogas que anulan temporalmente el apetito sexual de los sentenciados, lo que en el lenguaje judicial se conoce como castraci¨®n qu¨ªmica.
Cinco a?os
Roger Gauntlett ha sido sentenciado a permanecer el primer a?o en la c¨¢rcel del condado de Kalamazoo, Estado de Michigan, y cuatro bajo libertad vigilada. Durante la condena recibir¨¢ la droga seg¨²n las pautas de un tratamiento contra las desviaciones sexuales desarrollado por el hospital universitario John Hopkins, de Baltimore, Maryland.El juez Robert Borsos explic¨® ayer a los medios informativos que fall¨® en favor de la castraci¨®n qu¨ªmica porque la quir¨²rgica es considerada por el magistrado como "una pena cruel".
Los abogados del multimillonario anunciaron que apelar¨¢n la decisi¨®n por considerar que la droga causa serios des¨®rdenes en las personas a las que se aplica. En 1982, una revista especializada inform¨®, tras una investigaci¨®n, que el Depo Provera ocasion¨® serios des¨®rdenes a los animales a los que se aplic¨® durante prolongados per¨ªodos.
El producto ha sido prohibido por las autoridades sanitarias norteamericanas como contraconceptivo femenino, pero a¨²n es recetado con esta funci¨®n en varios pa¨ªses. La literatura cient¨ªfica del laboratorio fabricante, Upjohn, afirma que sus efectos secundarios en los hombres incluyen fatiga, p¨¦rdida de pelo y s¨ªntomas parecidos a los de la menopausia.
La droga, que suprime la hormona masculina testosterona, ha sido usada durante 15 a?os, a t¨ªtulo experimental, por convictos de delitos sexuales. Hay puntos de vista muy encontrados en la administraci¨®n de justicia norteamericana sobre los riesgos que entra?an condenas semejantes y la misma efectividad del preparado.
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