El verdadero padre del plan
Sard¨¤ Dexeus fue quien verdaderamente "trajo la idea de la idea de la estabilizaci¨®n". Si el plan tuvo muchos padrinos, el verdadero padre, entre la pl¨¦yade de economistas, fue ¨¦l, su decano. Como jefe del servicio de estudios del Banco de Espa?a, y volviendo de Venezuela, donde asesoraba al banco emisor, "me llam¨® a Washington M. Ferras, jefe de la divisi¨®n europea del FMI, me invit¨® a comer, estaba muy interesado en Espa?a, a ver c¨®mo enfoc¨¢bamos la crisis". De la discusi¨®n sali¨®, consensuada, la consigna: estabilizar.Le recibieron en el aeropuerto Navarro Rubio y Alberto Ullastres. "Les gust¨® la idea, aunque encontraban en ella muchas dificultades. Ellos no sab¨ªan exactamente lo que deb¨ªa hacerse, pero s¨ª. que deb¨ªa darse un golpe de tim¨®n", recuerda. "No sab¨ªan lo que pensaba Franco, si estaba o no de acuerdo, de forma que en los primeros momentos vacilaban un poco. Cuando ya vinieron las misiones internacionales, se fueron animando".
Otros lo tomaron peor, como en la banca privada: "el fin de la pignoraci¨®n perjudica a la banca. Entre lo que dice usted y lo que hay ahora, aqu¨ª habr¨¢ una guerra civil, me dijo Epifanio Ridruejo, don Epi", director general del Banesto. Pero al fin se vencieron las resistencias.
Una an¨¦cdota: "nadie se atrev¨ªa a plantear a Franco que la devaluaci¨®n hab¨ªa de llegar a 60 pesetas/d¨®lar, por el efecto psicol¨®gico del seis delante. De modo que Ullastres se fue a El Pardo y propuso hacer la devaluaci¨®n a 59 pesetas/d¨®lar. Franco contest¨®: "?Por qu¨¦ a 59?. P¨®nganla a 60, que es una cifra m¨¢s divisible".
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