Garc¨ªa M¨¢rquez: "La novela que escribimos entre muchos"

Diversos escritores de todo el mundo manifestaron ayer su pesar por la muerte de Julio Cort¨¢zar. Esta es una breve selecci¨®n de opiniones, que abre Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez, premio Nobel de Literatura y amigo personal de Julio Cort¨¢zar. Para ¨¦l, como para otros muchos autores, Cort¨¢zar era el epicentro de una actitud literaria que en Latinoam¨¦rica no puede ausentarse del compromiso ante la vida cotidiana, al tiempo que afirma la voluntad de creaci¨®n de un lenguaje nuevo.

Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez dijo ayer desde M¨¦xico: "Se ha muerto un gran amigo y despu¨¦s uno de los grandes escritores de nuestro tiempo. Esta es la pura verdad. Estaba totalmente de acuerdo con ¨¦l en las ideas pol¨ªticas, plenamente a su lado. Julio fue un pol¨ªtico tard¨ªo. Tard¨® a?os en desprenderse de una actividad puramente intelectual y s¨®lo tras la revoluci¨®n cubana adquiri¨® una conciencia pol¨ªtica. Literariamente hay muchas diferencias entre los dos, pero como he dicho muchas veces la novela latinoamericana es una sola novela que estamos escribiendo entre muchos. Si hay algo que explica las diferencias entre sus atrevimientos experimentales en la literatura y que le diferencian en parte de m¨ª es que ¨¦l fue siempre un escritor totalmente al tanto de las ¨²ltimas corrientes literarias y tambi¨¦n, esto me parece importante, de las novedades musicales. Realmente, si en el arte tuvimos Julio y yo un verdadero punto de contacto ¨¦ste fue la m¨²sica. Siempre hablamos m¨¢s de m¨²sica que de literatura y en m¨¢s de una ocasi¨®n nos hemos encontrado casualmente en los conciertos.Encontr¨¦ por primera vez a Julio Cort¨¢zar en Par¨ªs en 1956. Yo hab¨ªa le¨ªdo unos a?os antes, en Colombia, su libro de cuentos, Bestiario, y me hab¨ªa impresionado mucho. Me acerqu¨¦ por el caf¨¦ parisino Old Navy donde sol¨ªan reunirse algunos grupos argentinos y donde me hab¨ªan dicho que acud¨ªa Cort¨¢zar. No estuvo entonces muy expresivo. Por aquella ¨¦poca yo hab¨ªa publicado La hojarasca y era para ¨¦l un desconocido. Con todo, Cort¨¢zar s¨®lo dej¨® de ser una persona retra¨ªda despu¨¦s de comprometerse pol¨ªticamente. Lo volv¨ª a encontrar en 1967, tambi¨¦n en Par¨ªs, reci¨¦n publicada mi Cien a?os de soledad, y era una persona distinta. Su evoluci¨®n pol¨ªtica influy¨® decisivamente sobre su personalidad y, mientras antes hab¨ªa renunciado tercamente a servir de hombre-espect¨¢culo, con su compromiso pol¨ªtico no rehus¨® dar conferencias y manifestarse en p¨²blico. Dej¨® de ser aquel hombre que era un rat¨®n de biblioteca. A pesar de sus simpat¨ªas por la revoluci¨®n cubana, lo cierto es que sus conferencias se centraron sobre todo en Nicaragua. Tras perder a su esposa se refugi¨® en aquel pa¨ªs y all¨ª ha dejado numerosos amigos y un profundo recuerdo. Muchos amigos hemos coincidido en que ¨¦l empez¨® a morirse el d¨ªa en que muri¨® su ¨²ltima mujer. Todos sab¨ªamos que no sobrevivir¨ªa mucho a Carol".

Vargas Llosa: "Hombre de riqueza humana contagiosa"

Mario Vargas Llosa, escritor peruano, autor de La ciudad y los perros, dijo ayer desde Per¨²:"Estoy sobrecogido. Estimaba mucho a Julio. Convivimos en Par¨ªs a lo largo de casi siete a?os y fue siempre una relaci¨®n muy cordial pese a nuestras diferencias pol¨ªticas que nunca expropiaron la amistad. Mantuvimos un rec¨ªproco inter¨¦s por las cosas que dec¨ªamos y hac¨ªamos, y yo siempre he sentido una gran admiraci¨®n por su obra. Una obra en verdad decisiva para el florecimiento de la narrativa latinoamericana en la que destaca la aportaci¨®n de Rayuela sobre todo. Por otra parte, era una persona de una gran generosidad y de una riqueza humana contagiosa. Me ha apenado todav¨ªa m¨¢s su muerte porque, a pesar de que Cort¨¢zar tuviera setenta a?os, parec¨ªa siempre una -persona joven tanto en el aspecto f¨ªsico como en su ¨¢nimo. Este ¨ªmpetu y esta juventud fue acaso lo que le impuls¨® siempre a -buscar nuevas formas art¨ªsticas, formas temerarias incluso. Sus declaraciones pol¨ªticas ten¨ªan tambi¨¦n este aire adolescente, temerario, irresponsable. Y por esto tambi¨¦n eran m¨¢s atractivas y seductoras, y te mov¨ªan a excusarle algunas cosas que en otras personas no eran excusables. Con ¨¦l empieza a perderse todo un per¨ªodo de la literatura".

Calvino: "Proeza literaria"

El escritor italiano Italo Calvino dijo anoche desde Roma:"Mi recuerdo de Julio Cort¨¢zar est¨¢ m¨¢s unido al escritor que al pol¨ªtico. Nos uni¨® sobre todo en el per¨ªodo de 1950 a 1960 una amistad muy estrecha. Cort¨¢zar quedar¨¢ en mi recuerdo para siempre como la imagen de un hombre que sab¨ªa fundir maravillosamente sus exquisitas dotes humanas con una proeza literaria que yo calificar¨ªa de ¨²nica.

Yo he preferido siempre sus primeros libros de narraciones. Por ejemplo, Las armas secretas, Final del juego, Los premios, porque se trata de escritos en los que lo misterioso, lo fant¨¢stico y lo terrible nacen de un deseo minucioso de lo cotidiano. M¨¢s a¨²n que en sus novelas, creo que Cort¨¢zar se realizaba en narraciones como Historia de cronopios y de famas, en los cuales la genialidad de su fantas¨ªa resultaba verdaderamente feliz. Desde hace meses, yo segu¨ªa con ansia las noticias de su salud. Y sus amigos sab¨ªamos que por desgracia Cort¨¢zar estaba m¨¢s cercano al final de su tarea de lo que ¨¦l mismo imaginaba. Con ¨¦l la literatura mundial ha perdido a uno de sus exponentes de mayor valor y a un formidable observador cr¨ªtico del mundo contempor¨¢neo".

Onetti: "Airear su idioma"

El escritor uruguayo Juan Carlos Onetti, autor de El astillero, dijo ayer en Madrid:"Julio Cort¨¢zar y yo ¨¦ramos demasiado amigos para que me sea posible despedirle empleando las tan manoseadas palabras "funebreras", t¨¦rmino ¨¦ste de un tango que ¨¦l apreciaba.

Me limitar¨¦ a recordar su empe?o exitoso en airear la literatura en lengua castellana. Le bast¨®, acaso, con su novela Rayuela y unos ochenta cuentos. A juzgar por el alto n¨²mero de pichones cortazarianos que, actuando como jurado, encontr¨¦ en varios concursos literarios, quiero suponer que logr¨®, en gran parte, cumplir la noble tarea de renovaci¨®n que le hab¨ªa impuesto su amor por lo que llamamos las bellas artes. Nada m¨¢s, por ahora, que un chau Julio que no tendr¨¢ respuesta".

Otros juicios

Cort¨¢zar aparece como personaje fugaz, rodeado a su vez de algunas de sus criaturas literarias, en Gram¨¢tica parda, la ¨²ltima novela de Juan Garc¨ªa Hortelano, quien afirma deber al escritor fallecido "muchas horas de lectura maravillosa. Era uno de los autores con los que m¨¢s he conectado literaria, pol¨ªtica y humanamente". Camilo Jos¨¦ Cela, sorprendido por la muerte del autor de Rayuela, se refiri¨® a ¨¦l como "un gran escritor, una de las cumbres entre los escritores iberoamericanos ¨²ltimos". Otro, escritor espa?ol amigo de Cort¨¢zar, Jos¨¦ M. Caballero Bonald, coincidi¨® en la extra?eza por la muerte de "ese hombre elegante, correcto, con aparente perenne juventud".Juan Goytisolo dijo ayer desde Marruecos que ten¨ªa una gran admiraci¨®n por la obra de Cort¨¢zar anterior a Rayuela, "pero no comparto la admiraci¨®n que muchos tienen ante su obra posterior, por sus novelas. Creo que Cort¨¢zar pasar¨¢ a la historia de la literatura m¨¢s como un gran cuentista y narrador, que como novelista. Obras como Bestiario o Las armas secretas son absolutamente admirables, mucho m¨¢s admirables que sus novelas".