Beirut bien vale una misa

Deseoso de apaciguar los temores de las decenas de miles de cristianos residentes en el sector musulm¨¢n y occidental de Beirut, el movimiento pol¨ªtico-militar chiita Amal (Esperanza), que conquist¨® la ciudad hace dos semanas, envi¨® el domingo a uno de sus m¨¢ximos dirigentes, Mohamed Harake, a misa.Harake, al que le hab¨ªa sido reservado por el p¨¢rroco un lugar preferente en la iglesia greco-ortodoxa de Museitbe, parcialmente dinamitada el pasado mes de diciembre, hizo un vibrante llamamiento ante los fieles all¨ª congregados a favor de la coexistencia pac¨ªfica entre comunidades religiosas libanesas.

El padre Nohra, que oficiaba la misa, contest¨® abogando a su vez por la instauraci¨®n de relaciones "solidarias y cordiales" entre musulmanes y cristianos, y elogi¨® la moderaci¨®n de Amal, movimiento, seg¨²n ¨¦l, "opuesto al sectarismo religioso".

Las im¨¢genes de la ceremonia religiosa de esta y otras iglesias de Beirut oeste abrieron el domingo el telediario de la noche de la cadena de la televisi¨®n nacional, controlada por la oposici¨®n musulmana, que intent¨® as¨ª desmentir las acusaciones de la Prensa de la zona predominantemente cristiana.

La Prensa hab¨ªa se?alado que los retratos de los imanes Jomeini y Musa Sadr -misteriosamente desaparecido en Libia en 1978hab¨ªan sustituido en los lugares de culto los crucifijos y otros objetos religiosos. S¨®lo algunas fotograf¨ªas de estos dos dignatarios chiitas han sido, en realidad, pegadas en las paredes exteriores de algunas iglesias.

Cerca de 80.000 cristianos, que en su mayor¨ªa son greco-ortodoxos, viven en Beirut oeste, cuya poblaci¨®n total ronda los 900.000 habitantes, mayor¨ªtariamente chiitas y dirigidos espiritualmente por el vicepresidente del Consejo Superior Chiita jeque Mohamed Chamseddine -el presidente es el desaparecido Musa Sadr-, que el domingo recibi¨® al patriarca Ignace Iv Hazim, para preparar justamente una cumbre religiosa islamo-cristiana.