Elogios de o¨ªdas

El p¨²blico sovi¨¦tico ha o¨ªdo hablar de la pel¨ªcula El d¨ªa despu¨¦s e incluso ha visto unas secuencias en la televisi¨®n de su pa¨ªs, que, en el transcurso de un programa informativo, dedic¨® varios minutos a la cinta poco despu¨¦s de su estreno en EE UU. Los medios de comunicaci¨®n de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, por su parte, han dedicado comentarios positivos al filme.La televisi¨®n de la URSS posee varias copias de El d¨ªa despu¨¦s, facilitadas por los representantes en Mosc¨² de la cadena televisiva norteamericana ABC, productora del filme, seg¨²n informaron fuentes de esta empresa.
Una de estas copias es la que tal vez contempl¨® el viceprimer ministro de Defensa y jefe del Estado Mayor de la URSS, Ogarkov, quien, a finales del a?o pasado, elogi¨® p¨²blicamente la cinta, subrayando de paso el peligro y horribles consecuencias que podr¨ªa tener una eventual guerra nuclear.
Una quincena de altos funcionarios sovi¨¦ticos -entre ellos, especialistas del Instituto de Estados Unidos y Canad¨¢ (dependiente de la Academia de Ciencias de la URSS) y del Ministerio de Asuntos Exteriores- tuvieron ocasi¨®n de asistir a un pase privado organizado por la ABC de Mosc¨². Seg¨²n Robert Zelnick, representante de la cadena televisiva en la capital sovi¨¦tica, los funcionarios se mostraron impresionados por la cinta, elogiaron su realizaci¨®n y aseguraron comprender el impacto que ¨¦sta tuvo en EE UU. Los excepcionales espectadores sostuvieron, con todo, que el impacto de El d¨ªa despu¨¦s en la URSS no ser¨ªa, probablemente, tan fuerte como en EE UU, debido a la proximidad de la experiencia sufrida durante la segunda guerra mundial, que cost¨® a la Uni¨®n Sovi¨¦tica 20 millones de muertos.
Los invitados sovi¨¦ticos se?alaron tambi¨¦n que el planteamiento del filme, que de una forma vaga deja abierta una puerta al futuro tras la cat¨¢strofe, no encaja en el an¨¢lisis sovi¨¦tico, seg¨²n el cual, la guerra nuclear supone la destrucci¨®n total de la humanidad, con lo que no hay posibilidad de un conflicto limitado.
Aparte de poner el acento en el horror de un holocausto nuclear, los comentarios de Prensa sobre la pel¨ªcula se basan en la reacci¨®n del pueblo norteamericano ante la misma para afirmar que ¨¦ste se opone a la pol¨ªtica del presidente Reagan, cuyo rumbo podr¨ªa producir, en opini¨®n sovi¨¦tica, las desoladoras consecuencias mostradas en El d¨ªa despu¨¦s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
