30 polic¨ªas para un mill¨®n de personas
El fracaso de la modernizaci¨®n policial, una de las causas de la inseguridad
La brigada judicial del distrito de Chamart¨ªn, considerado como el de mayor ¨ªndice delictivo de Madrid, est¨¢ compuesta por estos 12 funcionarios, que s¨®lo cuentan con su pistola reglamentaria, un tel¨¦fono, una habitaci¨®n de 20 metros cuadrados y varios coches en deficientes condiciones. Nadie oculta que muchos de los delitos cometidos en el distrito no se pueden investigar, puesto que la plantilla es rid¨ªcula para garantizar la seguridad ciudadana.El edificio y las instalaciones "son propios de un pa¨ªs subdesarrollado", y en la inspecci¨®n de guardia, donde trabaja cada 24 horas un inspector y dos polic¨ªas nacionales, se tramitan una media de 90 asuntos diarios: denuncias, atracos, robos, homicidios, tr¨¢fico de drogas, etc¨¦tera. En lo que va de a?o se han tramitado en esta comisar¨ªa 11.619 asuntos y se han detenido a 205 personas.
La brigada judicial de este distrito ha tenido que investigar en lo que va de a?o 573 asuntos. "Como se puede observar", dice uno de los polic¨ªas, "es pr¨¢cticamente imposible poder investigar todos los casos, y nos dedicamos a los de mayor importancia, como es l¨®gico". Por ejemplo, en este ¨²ltimo mes se han cometido en este distrito 138 robos a establecimientos comerciales, sin incluir en esta cifra los numerosos atracos a bancos.
"Los 'maderos' carecemos hasta de consideraci¨®n"
Los 12 funcionarios de esta brigada podr¨ªan trabajar sin descanso las 24 horas del d¨ªa y todav¨ªa quedar¨ªan asuntos pendientes. A pesar de ello y de la l¨®gica desmoralizaci¨®n a que pod¨ªan verse sometidos, "nosotros tenemos metido el gusanillo, y comenzamos a trabajar a las ocho de la ma?ana y acabamos muchos d¨ªas a las doce de la noche". La direcci¨®n les paga unas dietas rid¨ªculas: s¨®lo si salen fuera de Madrid cobran, por "servicio permanente y riesgo", 8.684 pesetas, y sus confidentes les cuestan dinero. "Los maderos", dice uno de los funcionarios, "no estamos bien vistos por nadie y carece mos de todo, ?hasta de consideraci¨®n!".La inspecci¨®n de guardia, donde se toman las denuncias de los ciu dadanos, es "vergonzosa". "Muchas personas", dicen, "se quejan con raz¨®n porque tienen que espe rar horas y horas en una habitaci¨®n de 25 metros cuadrados para poneruna denuncia, y con las ¨²nicas tres celdas que tenemos para los detenidos, en muchas ocasiones hay que dejarlos por los pasillos". La situaci¨®n no puede ser m¨¢s ca¨®tica.
En la peque?a habitaci¨®n desti nada a la brigada judicial se mez clan los funcionarios oyendo una cinta de las legales, interrogando a un detenido, hablando por tel¨¦fo no, intercambiando informaci¨®n preparando informes o hablando con testigos.
Sin embargo, esta situaci¨®n no desmoraliza a ninguno de estos 12 j¨®venes investigadores y a su secretaria. Uno de ellos comenta que hagamos menci¨®n al problema familiar. "Nuestra mujer o nuestra novia siempre se quejan con raz¨®n de que nunca tenemos tiempo para ellas, y si est¨¢s a punto de cazar a un choro gordo, no lo vas a dejar porque has quedado con tu chica".
Los funcionarios de Chamart¨ªn realizan unas 1.000 detenciones al a?o. En 1983 se tramitaron 40.153 asuntos, que obviamente, en teor¨ªa, deber¨ªan haber sido investigados.
La mayor¨ªa de los funcionarios est¨¢ de acuerdo con la primera reforma del ministro de Justicia, Manuel Ledesma, "porque no es l¨®gico que muchas personas est¨¦n encarceladas preventivamente dos o tres a?os hasta que sean juzgadas, pero deben existir los medios para que la polic¨ªa pueda investigar todos los casos con rigurosidad y los jueces dispongan tambi¨¦n de lo medios necesarios para agilizar los procesos".
Esta misma situaci¨®n se repite en algunas comisar¨ªas, mientras que en otras reina la tranquilidad. El distrito de Centro es otro ejemplo similar al de Chamart¨ªn. Hay una media diaria de 60 asuntos.
En este tipo de comisar¨ªas, los funcionarios coinciden al quejarse de que la mayor¨ªa del tiempo lo consumen en funciones burocr¨¢ticas que podr¨ªa realizar otro personal, "y nosotros tendr¨ªamos m¨¢s tiempo para investigar".
En el mes de marzo, exceptuando la ¨²ltima semana, la polic¨ªa de Madrid detuvo y puso a disposici¨®n judicial a 1.213 personas. Los delitos m¨¢s frecuentes fueron atracos, robos y hurtos. Todos los detenidos en las comisar¨ªas son enviados a primera hora de la ma?ana a la Direcci¨®n de la Seguridad del Estado, en la Puerta del Sol, y de all¨ª, abiertos sus expedientes, son trasladados en furgones hacia los juzgados. Comienza ah¨ª una nueva fase.
Los juzgados, desbordados
En 1983 fueron puestos a disposici¨®n judicial en Madrid 11.627 personas, de las cuales 7.873 fueron puestas en libertad por la autoridad judicial, lo que demuestra que la rigurosidad policial no es elevada, ya que no deber¨ªan existir suficientes pruebas para decretar su ingreso preventivo en prisi¨®n, de acuerdo con la legislaci¨®n vigente.El problema de la falta de medios y personal tambi¨¦n se traslada a los juzgados, y esto imposibilita un r¨¢pida actuaci¨®n judicial. Por ejemplo, en 1983 se incoaron 170.978 asuntos en el juzgado de guardia, que posteriormente se repartieron entre los 21 juzgados de instrucci¨®n existentes en Madrid capital, lo cual tambi¨¦n demuestra la acumulaci¨®n de trabajo en estas dependencias.
El magistrado juez decano de Madrid, Salvador Dom¨ªnguez, se muestra casi indignado por la falta de medios materiales y personales en los juzgados. Salvador Dom¨ªnguez afirma que faltan medios para garantizar al ciudadano que su caso sea tramitado directa y personalmente por el juez. "Para que el juez act¨²e con la rapidez y agilidad necesarias hay que dotar a la Administraci¨®n de justicia de los medios necesarios para garantizar este derecho".
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