La ONCE un 'bunker' consentido

Desear¨ªamos que diera a conocer a sus lectores ciertos aspectos de la ONCE: su estructura colonial, enviando ni?os ciegos de siete a?os a estudiar a Alicante; su caciquismo, ignorando ol¨ªmpicamente cuantas promesas y convenios firmados (documentos de los a?os 1980, 1981, 1982.. .) encaminados a la constituci¨®n de un colegio de EGB para ciegos en Catalu?a haya podido realizar; su car¨¢cter antidemocr¨¢tico y, por tanto, inconstitucional por cuanto los menores ciegos no pueden votar en sus elecciones internas, los padres (por ser videntes) tampoco y los ciegos adultos que votan tienen hijos videntes: ?qui¨¦n representa, pues, los intereses de los ni?os ciegos en la ONCE? Nos encontramos en una clara situaci¨®n de opresion.Paralelamente, tenemos al PSOE c¨®mplice de esta situaci¨®n: en el a?o 1982 la ONCE (con el soporte activo de sus elementos socialistas) rechaz¨® un conven¨ªo con la Generalitat que hubiera permitido el funcionamiento de un colegio, aquel mismo a?o en Flor de Maig (Cerdanyola) a?adiendo que ellos (sin la Generalitat) ofrecer¨ªan una soluci¨®n mejor e inmediata, sin que hasta el presente ni la ONCE ni el Gobierno central ni el se?or Mart¨ª Jusmet, delegado del Gobierno y protagonista del tema desde el a?o 1980, hayan hecho nada. Tambi¨¦n cabe decir que el se?or Raimon Obiols estuvo informado, en su momento, del hecho significativo de que el pasado 11 de septiembre Catalu?a contaba con otra derrota m¨¢s a celebrar: el ¨¦xodo de ni?os ciegos en ruta hacia Alicante para empezar all¨ª una vez m¨¢s el curso por no disponer aqu¨ª de un colegio capaz.

Y la Generalitat, entre dos aguas: tiene competencias sobre educaci¨®n, pero no sobre la ONCE, cuya tutela contin¨²a en manos del Gobierno del PSOE./