El equipo de D¨ªaz Miguel consigui¨® su participaci¨®n ,en los Juegos Ol¨ªmpicos
ENVIADO ESPECIAL Espa?a jugar¨¢ al baloncesto en Los Angeles. D¨ªaz Miguel deber¨¢ ahora afrontar un pron¨®stico que, quiz¨¢s, le resulte inc¨®modo: para los t¨¦cnicos europeos, la selecci¨®n tiene la obligaci¨®n de disputar una medalla ol¨ªmpica y la ausencia de la URS S acent¨²a esta posibilidad. Lo que suceda ante Francia (13.00 horas de hoy) y la URSS resultar¨¢ anecd¨®tico. Desde luego, los jugadores desean derrotar a los sovi¨¦ticos porque consideran que es cuesti¨®n de prestigio, mientras que con Francia puede ocurrir cualquier cosa; es decir, Francia s¨®lo ganar¨ªa si Espa?a jugase mal. Ayer, el Reino Unido hizo lo que pudo por competir y divertir. Perdi¨® por 11 puntos por un descuido absurdo de los espa?oles en el ¨²ltimo minuto. Lo l¨®gico es que tampoco se hubieran alejado de los 20.
El Reino Unido result¨® m¨¢s f¨¢cil de lo que pudiera aparentar una diferencia final de 11 tantos y unos empates sucesivos en la segunda parte. Espa?a se entren¨® con comodidad y us¨® su contraataque ante estos supuestos apuros. Los brit¨¢nicos, de mayor¨ªa negra en esta selecci¨®n de baloncesto, mueven, bien la pelota y resultan un equipo r¨¢pido, con facilidad ofensiva, pero poca potencialidad reboteadora. Resultan vistosos en su juego, pero no demasidado inquietantes frente a una selecci¨®n que domine varias facetas, sobre todo porque tampoco logran mantener el ritmo todo el partido.
Ayer contaron con su mejor hombre, Johnson, en estado de gracia, con 44 tantos en su haber y un porcentaje de un 70%. Ahora bien, cuando alcanzaron algunos empates o su ¨²nica ventaja (50-5 1) en el minuto tres de la reanudaci¨®n, el partido sigui¨® sin emoci¨®n Dos minutos despu¨¦s, 5 7-5 1; y luego, 67-57. Ayer, m¨¢s que un encuentro, seejugaron an¨¦cdotas.
Los brit¨¢nicos, cuyo banquillo es el m¨¢s grosero del presente torneo por sus gritos y amenazas a la mesa, dieron alg¨²n color fuera de la cancha. A su t¨¦cnico, Schneeman, s¨®lo le ha faltado escupir y ayer dedic¨® algunas lindezas a D¨ªaz Miguel, quien contest¨®. El resultado fue igualado en este sentido y se proyect¨® en la pista a falta de un segundo para el descanso Ambos se empe?aron en mostrar sus cualidades a falta de tan escasa circunstancia. D¨ªaz Miguel sac¨® a Margall para intentar los dos puntos y su colega ingl¨¦s a Way para evitarlo. La jugada qued¨® anulada, por lo que hubo de repetirse, pero en direcci¨®n contra r¨ªa. Segu¨ªa faltando un segundo D¨ªaz Miguel sac¨® a Romay y su colega mantuvo el equipo. Quedaba todo un segundo tiempo y Espa?a ganaba 46-41, por lo que era un alarde fuera de lugar. Evidentemente, nada pas¨®. Al final, D¨ªaz Miguel y Scheneeman se dieron la mano amablemente.
M¨¢s colorido puso el t¨¦cnico espa?ol en sus acciones de banquillo dirigidas al colegiado turco Topoz¨®glu. "?No te equivocas de nuestro lado ni por casualidad!", "?Vete alam ... !", "?adem¨¢s de turco, eres feo y bajo!" y otras m¨¢s fuertes. El ¨¢rbitro turco se equivoc¨® en exceso y, normalmente, contra Espa?a, pero no tuvo trascendencia. Era, simplemente, un mal ¨¢rbitro.
Cuatro contraataques de Iturriaga bastaron para alejar cualquier emoci¨®n. Fue el ¨²nico dato clave porque no hizo falta ni siquiera recurrir demasiado al disparo de Epi. Hace cuatro a?os, en el preol¨ªmpico de Lucerna, Espa?a gan¨® al Reino Unido por 125-63; es decir, dobl¨® su puntuaci¨®n. La diferencia, ayer, que de 11, con tendencia a 20 porque en cuatro descuidos absurdos los brit¨¢nicos hicieran ocho tantos.
Algunos jugadores espa?oles parecen desmoralizados porque juegan poco. Se resisten a creer -que ante los brit¨¢rticos fuera necesario que Corbal¨¢n, Mart¨ªn y Jimenez jugaran todo el partido y que Epi s¨®lo estuviera ausente cinco minutos.
Los restantes resultados de la jornada fueron: Grecia, 104; Suecia, 80. URSS, I¨®0; RFA, 82. Francia, 102; Israel, 95. La clasilficaci¨®n la encabezan Espa?a y la URSS, con 10 puntos, seguidas de Francia, 9; Reino Unido y RFA, 7; Suecia y Grecia, 6, e Israel, 5.
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