Primera visita a Espa?a en 18 a?os de un ministro japon¨¦s de Asuntos Exteriores
El ministro de Asuntos Exteriores de Jap¨®n, Shintaro Abe, lleg¨® ayer por la ma?ana a Madrid en visita oficial, despu¨¦s de asistir en Londres a la reuni¨®n de las siete democracias m¨¢s ricas del mundo. Abe, que hoy se entrevistar¨¢ con el presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, despu¨¦s de haber conversado ayer a su hom¨®logo espa?ol, Fernando Mor¨¢n, es el primero de los asistentes a la cumbre de los siete que entra en contacto con el Gobierno espa?ol despu¨¦s de la reuni¨®n de Londres. Esta visita es la primera que realiza un ministro de Exteriores japon¨¦s desde hace 18 a?os.
Los temas pol¨ªticos primar¨¢n sobre los econ¨®micos durante esta visita del jefe de la diplomacia nipona. Jap¨®n, como Espa?a, est¨¢ tratando de aplicar sus buenos oficios en el conflicto irano-iraqu¨ª. Tambi¨¦n al igual que Espa?a, Jap¨®n mantiene buenas relaciones con ambos beligerantes, y adem¨¢s, ser¨ªa el pa¨ªs al que m¨¢s perjudicar¨ªa el cierre del estrecho de Ormuz.Los problemas de Latinoam¨¦rica centrar¨¢n parte de las conversaciones que Abe mantenga durante su estancia de poco m¨¢s de un d¨ªa en Madrid. En esta ocasi¨®n, el inter¨¦s japon¨¦s por este subcontinente puede ir m¨¢s all¨¢ de la pol¨ªtica: Jap¨®n tiene intenci¨®n de ampliar a Latinoam¨¦rica la cooperaci¨®n que, junto con Espa?a, ha desarrollado ya en el norte de ?frica e Indonesia.
Nada m¨¢s llegar a Madrid, Shintaro Abe acudi¨® al Cas¨®n del Buen Retiro para ver el Guernica, de Picasso, y posteriormente fue a visitar el palacio de Liria, propiedad de los duques de Alba, para conocer su pinacoteca. Por la noche, despu¨¦s de comenzar sus conversaciones con Fernando Mor¨¢n, el ministro de Asuntos Exteriores japon¨¦s fue invitado a cenar en el palacio de Viana por su hom¨®logo espa?ol.
Hac¨ªa 18 a?os que no llegaba a Espa?a un ministro de Asuntos Exteriores japon¨¦s. Sin embargo, a pesar de la ausencia de contactos, los intercambios econ¨®micos entre ambos pa¨ªses han ido marchando a buen paso. El desequilibrio de la balanza comercial es marcadamente desfavorable para Espa?a, lo que los japoneses atribuyen a la falta de inter¨¦s de los hombres de negocios espa?oles.
La maquinaria y aparatos electr¨®nicos japoneses de uso dom¨¦stico han desbancado a las exportaciones espa?olas de productos alimenticios y qu¨ªmicos. En 1983, Espa?a export¨® a Jap¨®n por valor de 398 millones de d¨®lares (unos 60.000 millones de pesetas), mientras import¨® de ese pa¨ªs por m¨¢s de 112.000 millones de pesetas.
Importaciones prohibidas
A pesar de ello, los japoneses acusan a Espa?a de "proteccionismo" por mantener una lista de 143 objetos cuya importaci¨®n de Jap¨®n est¨¢ prohibida: desde autom¨®viles, hasta f¨®sforos y abanicos.Si bien las posibilidades de equilibrar la balanza comercial no parecen demasiadas, la cooperaci¨®n econ¨®mica hispanonipona ha dado buen resultado: Espa?a es el pa¨ªs europeo en el que los japoneses han invertido m¨¢s dinero: m¨¢s de 200 millones de d¨®lares (m¨¢s de 30.000 millones de pesetas). El empleo creado por estas inversiones (12.663 puestos de trabajo) es tambi¨¦n el mayor del continente europeo, siendo m¨¢s del doble del segundo pa¨ªs de la lista, B¨¦lgica, en donde los capitales japoneses han generado s¨®lo 6.176 puestos de trabajo. Este flujo de inversiones niponas obedece, en parte, a la idea de que Espa?a entrar¨¢ pronto en la CEE, lo que, seg¨²n afirm¨® ayer Abe a su llegada a Barajas, ser¨ªa "muy positivo".
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