Consumir en Mosc¨²
En la vida cotidiana de un moscovita corriente, la integraci¨®n econ¨®mica en el marco del Comec¨®n (mercado com¨²n socialista) significa un conjunto de productos que van desde la cosm¨¦tica polaca a los pollos congelados h¨²ngaros, pasando por la ropa interior de la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana y los cigarros cubanos.Sobre el plano de la capital de la URSS, la integraci¨®n econ¨®mica se traduce en varios grandes almacenes representativos de los distintos pa¨ªses socialistas europeos.
Los nombres dejan bien claro el pabell¨®n representado: Leipzig (RDA), Varna (Bulgaria), Budapest (Hungr¨ªa), Polskaia Moda (Polonia).
A la zona comprendida entre los grandes almacenes de la RDA, los almacenes yugoslavos -el pa¨ªs balc¨¢nico tiene un estatuto especial asociado en el Comec¨®n- y la tienda de modas polaca, algunos moscovitas le llaman, humor¨ªsticamente, el tri¨¢ngulo de las Bermudas, debido a la gran cantidad de gente que parece haberse perdido deambulando por la regi¨®n.
Efectivamente, la ropa polaca, las l¨¢mparas y la lencer¨ªa de la RFA -especialmente los sostenes- y los muebles yugoslavos son objetos apreciados por los habitantes de Mosc¨².
Tienen fama de mejores las ropas deportivas polacas, la cosm¨¦tica de Polonia y Bulgaria, las mermeladas, conservas vegetales y vinos de Hungr¨ªa y Bulgaria, los muebles y zapatos de Checoslovaquia.
En la tienda h¨²ngara Balaton se venden vinos de numerosos tipos. Un conocedor de la cocina h¨²ngara, sin embargo, echa de menos las mejores calidades.
Salami y tokai h¨²ngaro o jam¨®n checoslovaco los hay en Mosc¨², pero en tiendas especiales para los ciudadanos de aquellos pa¨ªses, cerradas al p¨²blico sovi¨¦tico en general.
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