La conciencia fiscal

Sin querer extenderme hablando de lo que es de sobra conocido por todos sobre la picaresca del tema ele la declaraci¨®n del impuesto sobre la renta de las personas f¨ªsicas, s¨ª deseo expresar mi opini¨®n sobre su editorial del 5 de junio, Conciencia fiscal. Y no porque est¨¦ en desacuerdo con pagar a Hacienda, sino porque sus afirmaciones "...la ¨²nica forma moral y pol¨ªticamente respetable de fortalecer la conciencia fiscal es asegurar la transparencia y la sustancial mejora de los servicios, p¨²blicos, de los gastos p¨²blicos...", y m¨¢s abajo, "...sustancial mejora de los servicios p¨²blicos, de forma que su financiaci¨®n parezca natural al ciudadano...", son inadecuadas e insultantes para parte de los espa?oles.Trabajo, como tantas otras personas, para la Administraci¨®n, y nunca se me ha pedido opini¨®n sobre dichos servicios, ni mucho menos si quer¨ªa cotizar para su mantenimiento. ?Por qu¨¦ entonces hay que mejorarlos para forzar (eso s¨ª, siempre dentro de la Constituci¨®n) a los defraudadores a dejar de serlo? Los servicios tienen que mejorar, de acuerdo; pero esos se?ores deber¨ªan haber contribuido a ello desde hace tiempo. No veo la necesidad de pedir con tanto tacto a unos lo que a otros se nos exige. El agravio comparativo se viene produciendo hace ya mucho tiempo, y para los que lo sufrimos es irritante. ?Y qu¨¦ decir de los que de siempre, aun en esos tiempos en los que, seg¨²n ustedes, no estaba pol¨ªticamente justificado, han cotizado porque ya se les descontaba en n¨®mina?

Por otra parte, ustedes dicen textualmente: "...al parecer, estas medidas est¨¢n incluidas en el anteproyecto de ley de Represi¨®n del Fraude Fiscal...". Opino que ser¨ªa

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