Una propuesta para hacer renacer la zarzuela
El Primer Seminario Internacional de Zarzuela, convocado por el Instituto Internacional del Teatro, termin¨® en la Escuela Superior de Canto con resultados de gran inter¨¦s. Tanto que muchos participantes, espa?oles y extranjeros, hablaban ya de la conveniencia de proseguir en a?os sucesivos estas conversaciones. Rafael P¨¦rez Sierra dirigi¨® todos los debates y discusiones (a veces pol¨¦micas y con frecuencia demasiado generalizadas) con suprema cortes¨ªa: la de medir y valorar el tiempo, la de obligar a cuantos intervinieron a comprimirse", como dice el tabernero de La verbena de la Paloma.
A la parte literaria -esto es, a los libretos- dedicaron atenci¨®n en sus ponencias Andr¨¦s Amor¨®s y Enrique Llovet. El primero para hacer luz en el disperso camino de la bibliograf¨ªa zarzuel¨ªstica tanto como para pedir la incorporaci¨®n del estudio de la zarzuela al general del teatro espa?ol. Llovet para investigar qu¨¦ libretos y argumentos podr¨ªan interesar al espa?ol de hoy. Analiz¨® el conjunto de posibles argumentos y se arriesg¨® a seleccionar aquellos que consideraba m¨¢s explotables "aqu¨ª y ahora".
Indirectamente, el texto cobr¨¦ importancia protagonista en la ponencia de Eduardo Huertas sobre la "revista fin de siglo", derivaci¨®n o hija menor y fr¨ªvola de la zarzuela, buscadora del mayor espect¨¢culo y, a la vez, agud¨ªsima en la cr¨ªtica pol¨ªtica.
La importancia hist¨®rica de la zarzuela -en especial del g¨¦nero chico- reside en su valor como teatro musical popular, aspecto tratado por Carlos G¨®mez Amat desde perspectivas culturales y consideraciones que demuestran la viabilidad del g¨¦nero bajo distintos condicionantes, sin nostalgia evocadora ni tradicionalismo de repetici¨®n. La zarzuela fue actual y s¨®lo puede volver con ese valor sustantivo.
Posibilidad de una zarzuela actual
"Desde un punto de vista musical reivindiqu¨¦ la inclusi¨®n de la zarzuela en la historia general de nuestra m¨²sica, como antecedente y ra¨ªz del movimiento nacionalista y popularista que culminar¨¢ en Falla, sus congeneracionales y sus seguidores; sin conocer su texto situ¨¦ el tema en paralelo con el literario", seg¨²n la ponencia de Amor¨®s.Tom¨¢s Marco, como autor, acept¨® la posibilidad de un teatro musical -ll¨¢mese o no zarzuela- en nuestro tiempo. El compositor madrile?o espera desde hace tiempo libretos de distintos escritores, pues son ellos quienes tienen en su mano la revitalizaci¨®n de un g¨¦nero hoy hist¨®rico y, al mismo tiempo, de gran ¨¦xito. Marco aludi¨® a su trabajo musical para Nieva en Los ba?os de Argel, concebido como una forma de teatro musical cantado y hablado.
Fern¨¢ndez Montesinos se refiri¨®, desde su propia experiencia, a los problemas de la direcci¨®n esc¨¦nica, recalc¨® la sustantividad teatral de la zarzuela y aludi¨® a ciertos factores negativos: el dominio excesivo de lo musical y la actitud de buena parte de la cr¨ªtica.
Por su parte, Pedro Pardo se .detuvo en la cuesti¨®n, nada accesoria, de la danza en la zarzuela, uni¨®n que aparece en los mismos or¨ªgenes tonadilleros del g¨¦nero y que se renueva con la incorporaci¨®n de nuevos ballets (sobre preludios o intermedios) en los montajes de los directores actuales.
Para Ruiz Tarazona son grandes los vac¨ªos en la discograf¨ªa zarzuel¨ªstica, algunos tan importantes que impiden una panor¨¢mica completa del g¨¦nero. Se repiten los mismos t¨ªtulos por las casas grabadoras, y dado el alto coste de las producciones, quiz¨¢ sea necesario el patrocinio oficial o privado para ciertos lanzamientos al mercado. "No es cierto que los compositores de zarzuela maltraten la voz", asegur¨® el profesor de la Escuela Superior de Canto, Ram¨®n Regidor, ?si el int¨¦rprete posee buena escuela". Lo que es inevitable es la dedicaci¨®n de los cantantes a un g¨¦nero de mayor universalidad como es la ¨®pera.
Homenaje a Pablo Soroz¨¢bal
Conferencias sobre la zarzuela en Filipinas y Cuba interesaron a todos, pero sobre todo a los espa?oles. H¨¦ctor Quintero, autor y regista, expuso el desarrollo de la zarzuela cubana cuando la espa?ola empieza a declinar. Critic¨® la calidad de los libretos y cit¨® t¨ªtulos tan populares como Rosa la China, Cecilia Vald¨¦s o Mar¨ªa la O, as¨ª como los autores principales del. g¨¦nero: Grenet, Lecuona, Roig y Prats.En la Sociedad General de Autores, el compositor Pablo Soroz¨¢bal, el ¨²ltimo grandede la zarzuela, recibi¨® en la persona de su hijo la medalla de honor, Bien la merece por sus originales aportaciones, su nueva consideraci¨®n del sainete (La del manojo de rosas, Adi¨®s a la bohemia, sobre Baroja) y la inmensa popularidad de gran parte de su obra.
Fueron entregados pergaminos a tres hombres de distinta generaci¨®n y continua dedicaci¨®n a la zarzuela: Jos¨¦ Mar¨ªa G¨®mez Labad, Carlos G¨®mez Amat y Fernando Garc¨ªa de la Vega, de RNE, SER y TVE respectivamente.
Apoyo oficial
A modo de conclusiones ser¨¢ publicada una serie de acuerdos adoptados por la asamblea. En l¨ªneas generales, solicitan mayor atenci¨®n de la Administraci¨®n, reducciones en los precios de viaje de las compa?¨ªas, trata miento especial de ciertos impuestos, reconstrucci¨®n y edici¨®n de partituras y materiales de orquesta, estreno anual de una, obra en la temporada de la zarzuela, extensi¨®n de los ciclos dedicados al g¨¦nero en el coliseo oficial de la calle de Jovellanos, inclusi¨®n de recitales y versiones de concierto de zarzuela en las temporadas de las orquestas oficiales y creaci¨®n de un concierto de fin de a?o, al modo vien¨¦s, pero con nuestra m¨²sica equivalente a los Strauss y Lanner de Austria.
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