El futuro de la pesca pasa por la creaci¨®n de empresas mixtas, los cultivos marinos y los acuerdos de acceso a aguas extranjeras
Empresas mixtas, acuicultura, acuerdos -sin duda pasajeros- de acceso condicionado a las aguas de los dem¨¢s: he aqu¨ª el dif¨ªcil porvenir que est¨¢ empezando para los pa¨ªses pesqueros que, como Espa?a o Jap¨®n, faenaban tradicionalmente en aguas lejanas. La ley del Mar de 1982, con su creaci¨®n de las zonas econ¨®micas exclusivas. (ZEE) de 200 millas -unos 360 kil¨®metros-, cambi¨® permanente e irreversiblemente las reglas del juego en favor de los pa¨ªses ribere?os, muchos de ellos tercermundistas, que hoy controlan el 95% de las capturas mundiales.
Ese futuro va a ser examinado a partir del pr¨®ximo 27 de junio en la Conferencia Mundial de Pesca que convoca la Organizaci¨®n para la Alimentaci¨®n y la Agricultura de las Naciones Unidas (FAO).La conferencia atraer¨¢ a m¨¢s de 160 pa¨ªses y 70 organizaciones diversas. Es la primera que se convoca como consecuencia de la Convenci¨®n sobre el Derecho del Mar, y la m¨¢s importante conferencia jam¨¢s organizada sobre ordenaci¨®n y desarrollo de la pesca.
El Rey de Espa?a inaugurar¨¢ esta conferencia romana, gesto que ha sido valorado por los directivos de la FAO como "una muestra de la actitud positiva de Espa?a ante la nueva situaci¨®n", aunque alguno recalque su car¨¢cter, algo pol¨¦mico, ya que hay mieriibros que consideran a Espa?a como prototipo de pa¨ªs depredador de aguas ajenas".
En todo caso, los pa¨ªses desarrollados quedan en un segundo plano en una reuni¨®n dirigida ante todo al desarrollo del potencial pesquero del Tercer Mundo. Y para los pa¨ªses desarrollados, y adem¨¢s privados de caladeros propios, las reuniones de Roma se anuncian como una dura toma de contacto con una realidad hostil.
"El acceso a otras aguas mediante convenios bilaterales va a subsistir algunos a?os -quiz¨¢ 30 en unos casos, pero tan s¨®lo cinco en otros-, aunque tiende a desaparecer", afirma Jean E. Carroz, director general adjunto de la FAO y secretario general de la conferencia. "Es sintom¨¢tico el radical cambio de rumbo de un pa¨ªs de poblaci¨®n escasa, n¨®mada y que no consume pescado, como Mauritania. Desde hace cinco a?os est¨¢ asumiendo paulatinamente la explotaci¨®n directa de sus recursos pesqueros. Y tambi¨¦n hay que se?alar que en el Atl¨¢ntico suroccidental, la principal ¨¢rea infraexplotada que queda en el mundo, los pa¨ªses ribere?os latinoamericanos prefieren prohibir el acceso extranjero". Para los cuatro grandes de la pesca lejana -URSS, Jap¨®n, Espa?a y Tailandia-, la nueva situaci¨®n es negativa, pero no todos la sufren igual. En el caso de Espa?a, el retroceso del sector es evidente. Las capturas cayeron en un 15% entre 1982 y 1983, de 1.351.000 toneladas a 1.114.000; las importaciones, de 526 millones de d¨®lares en 1983 a 395 millones en 1983; las exportaciones, que s¨®lo descendieron un 4%, entre esos dos a?os, ya hab¨ªan ca¨ªdo en picado (de 439 millones a 292 millones de d¨®lares) entre 1981 y 1982.
Jap¨®n se ha adaptado por una pol¨ªtica variada de mejora de la acuicultura, explotaci¨®n ¨®ptima de su propia pesca costera y multiplicaci¨®n de las empresas mixtas. De las 600 que hay en el mundo, en m¨¢s de 200 participan japoneses.
Capturas estancadas
Aunque las 200 millas han beneficiado m¨¢s que a nadie a dos pa¨ªses avanzados -Canad¨¢ y Estados Unidos; este ¨²ltimo, parad¨®jicamente, no es signatario a¨²n de la convenci¨®n de 1982-, la conferencia de Roma pretende ante todo ayudar a los tercermundistas a explotar mejor sus ZEE. Y es que el potencial de crecimiento pesquero se concentra ante todo en zonas tercermundistas, donde la pesca artesanal puede ser, adem¨¢s, importante fuente de empleo.Las capturas mundiales est¨¢n estancadas en torno a los 76 millones de toneladas anuales -frente a una producci¨®n de carne, de todos los tipos, de 140 millones-, de los que 55 millones se dedican a consumo humano y el resto se convierte en harina de pescado. Y para el a?o 2000 se prev¨¦ una demanda de 100 millones de toneladas para consumo humano.
La FAO, organismo m¨¢s pragm¨¢tico que otros de la ONU, suele favorecer soluciones sectoriales paso a paso, y pretende que los Gobiernos encuentren un foro distendido para sus enfrentamientos y malos entendidos. En ese clima, buscar¨¢ ayuda de los pa¨ªses ricos -hasta ahora, s¨®lo Noruega y Dinamarca la dan para financiar un plan quinquenal de acci¨®n en cinco ¨¢reas: pesquer¨ªas (mar¨ªtimas y continentales), pesca artesanal, acuicultura, comercio internacional de pescado y derivados, y lucha contra la malnutrici¨®n.
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