Vinyoli

Un poeta cumple 70 a?os. Se llama Joan Vinyoli y ha conseguido ser uno de los cinco poetas catalanes de posguerra de obligada menci¨®n: Espriu, Pere IV, Mart¨ª Pol, Gabriel Ferrater y ¨¦l. Una de las asignaturas pendientes de los distintos pueblos que componen Espa?a es el conocimiento del estado de las artes y las letras en aquellas comunidades aut¨®nomas que tienen lengua y literatura propias. La Espa?a culta sabe que existe Salvador Espriu, pero casi desconoce la restante poes¨ªa catalana contempor¨¢nea, a pesar de los esfuerzos traductores de Jos¨¦ Batll¨®, Jos¨¦ Agust¨ªn Goytisolo o Pere Gimferret.Fue precisamente Jos¨¦ Agustin quien trat¨® de dar a conocer a Vinyoli en toda Espa?a mediante una excelente traducci¨®n de 40 poemas, en su d¨ªa glosada en las p¨¢ginas de EL PAIS. Ahora Joan Vinyoli es noticia, Va a ser reconocido hijo predilecto de Barcelona, cuando todav¨ªa hay demasiado silencio en torno de una obra que ni cede ni ?esa. Poeta que se ha apoderado de la perfecci¨®n, como lo demuestran sus dos ¨²ltimas entregas publicadas por Emp¨²ries, Joan Vinyoli al poner t¨ªtulo a uno de sus poemarios El callat (El callado) se puso t¨ªtulo a s¨ª mismo. Vinyoli habla gratis al paso de los amigos que encuentra por la calle o a Ya orilla del tel¨¦fono, con esa mala salud de hierro a cuestas que algunos atribuyen a su antigua condici¨®n de bebedor de fondo, condici¨®n de poeta perdido sin collar.

Escritor a su aire, nace de lo mejor de la poes¨ªa catalana y europea de entreguerras y del respeto a la tradici¨®n greco-latina. Luego Vinyoli se supera a s¨ª mismo libro a libro, desde una l¨®gica po¨¦tica interna desconectada de las modas y los designios culturales: cuando predominaba la poes¨ªa social se le acusaba de simbolista e intimista; luego, cuando se recuper¨® la libertad de escribir, Vinyoli era un caso demasiado peculiar. No encajaba en los esquemas del carquismo cr¨ªtico catal¨¢n y no se esforz¨® en pasar factura por un largo y constante compromiso democr¨¢tico antifranquista. Por muchos a?os que siga escribiendo este fr¨¢gil hombre y poderoso poeta, al que he querido regalarle una columna de EL PAIS en el d¨ªa de su cumplea?os.