Los hombres de la cultura analizan las desventuras de la democracia en Am¨¦rica Latina
"Los pueblos de Am¨¦rica no ser¨¢n independientes y libres -ilusi¨®n m¨¢s que peligrosa: mortal- con el apoyo, las armas, la intervenci¨®n, el dinero, el modelo castrista rusificante". Esta aseveraci¨®n de Carlos Franqui parece uniricar el criterio general de casi todos los ensayos que forman el libro Am¨¦rica Latina: despenuiras de la democracia, que acaba de aparecer en M¨¦xico publicado por la editorial Joaqu¨ªn Mortiz/Planeta. Una obra que, sin lugar a dudas, despertar¨¢ pol¨¦mica, dada la influencia que estos hombres ejercen sobre los acontecimientos pol¨ªticos en Sudam¨¦rica.
Se trata de una recopilaci¨®n de art¨ªculos de Mario Vargas Llosa, Guillermo Cabrera Infante, Octavio Paz, Carlos Franqui, Jorge Edwards y varios intelectuales latinoamericanos m¨¢s, reunidos y prologados por el historiador Enrique Krauze, subdirector de la revista Vuelta, que dirige Octavio Paz. En su texto, Paz se?ala que "desde hace cerca de dos siglos se acumulan los equ¨ªvocos sobre la realidad hist¨®rica de Am¨¦rica Latina. Ni siquiera los nombres que pretenden designarla son exactos. Am¨¦rica Latina, Am¨¦rica hispana, Iberoam¨¦rica, Indoam¨¦rica; cada uno de estos nombres deja sin nombrar a una parte de la realidad".En el an¨¢lisis pol¨ªtico actual, Paz acusa a los intelectuales latinoamericanos de haber abrazado el marxismo-leninismo de la misma manera que antes al liberalismo y al positivismo., Sus abuelos juraban en nombre de santo Tom¨¢s; ellos, en el de Marx.
Periodistas muertos
Vargas Llosa, en Historia de una matanza, reconstruye con precisi¨®n de hechos y lenguaje la muerte de los ocho periodistas en Ayacucho (Per¨²) que tanta resonancia tuvo en la Prensa mundial a principios del a?o pasado. Interpreta la matanza como una reacci¨®n de p¨¢nico de los ind¨ªgenas por las represalias que contra ellos toman los guerrilleros del grupo Sendero Luminoso cuando no les prestan colaboraci¨®n. Respecto a esta interpretaci¨®n, el a?o pasado el periodista Jos¨¦ Mar¨ªa Salcedo denunci¨® que Vargas Llosa tergiversaba los hechos para beneficiar al presidente Bela¨²nde Terry. Salcedo es en Per¨² una opini¨®n autorizada sobre ese suceso, ya que tres de los periodistas asesinados pertenec¨ªan al Diario de Marka, del cual era en ese momento director, y despu¨¦s del suceso viaj¨® a Ayacucho para realizar una investigaci¨®n personal sobre los hechos.En opini¨®n de Salcedo, los periodistas fueron asesinados "no s¨®lo por instigaci¨®n de la polic¨ªa, sino por una orden o sugerencia m¨¢s directa" (Unomasuno, M¨¦xico, 4-9-1983). El trabajo de Vargas Llosa concluye que "la historia de los ocho periodistas muestra lo vulnerable que es la democracia en Am¨¦rica Latina y la facilidad con que ella parece bajo las dictaduras militares o marx¨ªstas-len¨ªnistas".
Ideolog¨ªa del suicidio
El suicidio en Cuba se titulaba el ensayo de Guillermo Cabrera Infante, quien sostiene que no "se puede entender la revoluci¨®n cubana si no se considera como uno de sus elementos integrales, casi esencial, al suicidio"; hace un largo recuento de personajes en la historia de Cuba que se suicidaron, incluyendo entre ellos al Che Guevara, ya que citando a Vargas Llosa considera un suicidio la acci¨®n emprendida por el Che en Bolivia. Finaliza con la que fue directora de la Casa de las Am¨¦ricas:"El suicidio era su ¨²nica ideolog¨ªa, a pesar del fidelismo que la hizo pol¨ªtica y del marxismo, al que se convirti¨® m¨¢s tarde. Hay de Santamar¨ªa, no hab¨ªa nacido para la muerte, sino para el suicidio". Cabrera Infante aporta un lema: "Comunista de Cuba, suicidaos. No ten¨¦is nada que perder m¨¢s que la tapa de vuestras cabezas", y concluye: "La pr¨¢ctica del suicidio es la ¨²nica y, por supuesto, definitiva ideolog¨ªa cubana".
Gabriel Zaid ofrece una larga, pormenorizada y minuciosa reconstrucci¨®n en "una lectura de la tragedia salvadore?a; se?ala el origen com¨²n de diversos l¨ªderes hoy enfrentados. Jos¨¦ Napole¨®n Duarte, actual presidente electo, fue candidato del Partido Comunista salvadore?o en 1972, con Guillermo Ungo de compa?ero de f¨®rmula, quien un a?o antes hab¨ªa integrado la junta que de spu¨¦s combatiera y actualmente es presidente del Frente Democr¨¢tico Revolucionario. Zaid analiza el caso del poeta y militante Roque Dalton, a quien caracteriza como "v¨ªctirna del militarismo guerrillero", para concluir que la situaci¨®n de El Salvador no es, como dijera Alexander Haig, el escenario donde se enfrentan dos potencias ni como podr¨ªa surgir de una lectura superficial de la Prensa, que "los salvadore?os de abajo, explotados y asesinados por los de arriba, han tomado las armas contra un r¨¦gimen opresor apoyado por Estados Unidos".
Los de arriba no se ponen de acuerdo en c¨®mo tratar a los de abajo". Di¨¢logos sobre Argentina es una larga entrevista a Ernesto S¨¢bato sobre la situaci¨®n de su pa¨ªs, que al omitir en esta edici¨®n el nombre del entrevistador y la fecha en que fue realizada o publ¨ªcada originalmente, impide reconocer el valor de estas declaraciones que seguramente fueron hechos en plena dictadura militar.
Enrique Krauze analiza la situaci¨®n mexicana y la crisis actual, cuyo "origen es la irresponsabilidad con que el Gobierno dispuso de la enorme riqueza que pas¨® por sus manos entre 1977 y 1982". Haciendo finalmente una llamada a la iniciativa, palabra que no es ajena al vocabulario hist¨®rico mexicano. M¨¦xico aboli¨® la esclavitud antes que el Reino Unido y que Estados Unidos, desterr¨® de un plumazo los prejuicios raciales y religiosos, y fue un Estado nacional antes que Italia o Alemania. Danubio Torres Fierro comenta las elecciones en Uruguay de noviembre de 1982. Jos¨¦ Miguel Oviedo escribe Per¨²: la democracia sin desencantos; Juan Nu?o, sobre la democracia en Venezuela, y Antonio Marim¨®n y Horacio Crespo en Argentina: vuelta a la democracia describen el triunfo de Ra¨²l Alfons¨ªn sobre el peronismo dentro del contexto hist¨®rico reciente de los Gobiernos militares y de Per¨®n e Isabel.
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