Los ¨²ltimos Dal¨ª
El artista no pinta un cuadro desde abril de 1983, pero ha manifestado su inter¨¦s en realizar tres: uno para Figueres, otro para la Generalitat y un tercero para el Rey
"Me disgusta que me traten de secuestrador, cuando lo ¨²nico que pretendo es que se respete la voluntad de Dal¨ª", se defendi¨® por su parte Descharnes, mientras Antoni Pitxot, quiz¨¢s el m¨¢s dolido de los tres por tantas declaraciones y por el reciente reportaje de Informe Semanal, declar¨®: "Me decepciona que un amigo inteligente como Tharrats haga reflexiones tan poco profundas sobre Dal¨ª y su ¨²ltima obra. Dal¨ª adaptaba muy bien en los ¨²ltimos a?os sus limitaciones t¨¦cnicas a sus condiciones fisicas. T¨¦cnicamente sus cuadros eran menos complicados, con gran econom¨ªa de medios a un servicio determinado. Por esta raz¨®n es rid¨ªculo cuestionarlos. Es tan Dal¨ª una tela de hace un a?o como la Madona de Port Lligat. Y esto Tharrats tiene que saberlo". Seg¨²n Robert Descharnes, el artista estuvo pintando hasta abril del a?o pasado. "Desde entonces no ha cogido los pinceles, aunque hace apenas un mes realiz¨® varios dibujos en el fibro Paraboles et catastrophes (Entretiens sur les mathematiques, la science et la philosophie) de Ren¨¦ Thom". En efecto, seg¨²n pudo comprobar este diario, el mencionado libro de la Editorial Flaminarion tiene una docena de dibujos, uno de ellos representando a una mujer desnuda en actitud danzante, al que incluso puso la firma el artista. "El pasado 28 de mayo", recuerda Antoni Pitxot "llam¨® muy excitado a mi casa de Cadaqu¨¦s para decirme: 'Ven, corre, ven que he hecho unos dibujos sublimes'. Uno de ellos era una figura femenina, otro era un rostro masculino, en el que afirm¨¦ reconocer a Byr¨®n y hab¨ªa otros de una pelea entre un ¨¢guila y un le¨®n, que desarrollaba un texto de Lucrecio".Aquel mismo d¨ªa llam¨® telef¨®nicamente el escritor Camilo Jos¨¦ Cela para llevar a cabo una entrevista para la revista Interviu y, extra?amente, Dal¨ª la acept¨®, posiblemente porque ten¨ªa un buen d¨ªa y se sent¨ªa estimulado por sus dibujos a pluma. Sin embargo, cuando una semana m¨¢s tarde se presentaron Cela y el fot¨®grafo en P¨²bol se neg¨® en redondo a recibirles. Aquellos d¨ªas tambi¨¦n se dio cita en el castillo un equipo de TVE que deb¨ªa realizar un reportaje para Informe Semanal, convencidos de que podr¨ªan ver al Divino. Pero Dal¨ª se neg¨® en redondo. Antoni Pitxot comenta sobre este incidente: "Presionamos todo lo que pudimos para que dijera alguna cosa por televisi¨®n y le hice ver esta necesidad para desmentir a los que dicen que permanece secuestrado. Al no con seguirlo, intentamos que hiciera unas cortas declaraciones por tel¨¦fono, pero sigui¨® neg¨¢ndose. Final mente me llam¨® y me dijo: 'Dejad que crezcan los rumores; cuando sean m¨¢s importantes entonces intervendr¨¦"
"Dejad que crezcan los rumores y sean importantes"
Pero lo cierto es que los rumores han empezado a dispararse y recientemente un alto cargo pregunt¨® a Pitxot: "Anton' , dime la verdad: Dal¨ª est¨¢ o no est¨¢ muerto".Dal¨ª es un hombre debilitado mentalmente por la arterioesclerosis, aunque todav¨ªa conserva momentos de cierta lucidez, seg¨²n los m¨¦dicos. Pesa 40 y pocos kilos y semanalmente es objeto de controles cl¨ªnicos. Cinco m¨¦dicos lo visitan. Se trata de los internistas Garc¨ªa Sanmiguel y Espin¨®s y de los psiquiatras Ball¨²s, Lermit (franc¨¦s) y Borbach (norteamericano). Es un paciente dificil que puede insultar, patalear o escupir para defender su independencia respecto a quienes le atienden. Cuatro enfermeras le vigilan constantemente.De la cama a la mesa y de la mesa a la cama
Su r¨¦gimen de vida pasa por la comida y la cama. As¨ª lo explica Miguel ' Dom¨¦nech: "Se levanta a las ocho de la ma?ana, desayuna, da ¨®rdenes o se ensimisma y vuelve a la cama. A mediod¨ªa, se levanta para comer algo y se acuesta. A eso de las seis de la tarde se pone en pie de nuevo para cenar un poco y vuelve a descansar. Pero hay d¨ªas en que no ingiere ni siquiera un poco de sopa o pescado hervido y entonces no queda m¨¢s remedio que aplicarle el gota a gota. Sobre las 22 horas le damos las buenas noches". A pesar de las muchas horas que pasa acostado, en una inmovilidad que preocupa a los m¨¦dicos, Dal¨ª confiesa a Pitxot: "El sue?o, mi problema es el sue?o". Pero los psiquiatras se resisten a darle tranquilizantes porque podr¨ªan agravar su actual estado.
La terna que defiende a Dal¨ª de los ojos de amigos y curiosos asegura que ser¨ªa bueno que volviera a su casa de Port Lligat porque el sol, el mar y las condiciones de la casa le resultar¨ªan m¨¢s favorables que las paredes altas, de piedra y escasamente iluminadas de su caser¨®n interior. Pero Dal¨ª no quiere ni o¨ªr hablar del tema, pues desea morir en P¨²bol y ser enterrado junto a Gala -de quien por cierto nunca habla- en la cripta que ¨¦l mismo ha decorado con animales y objetos singulares. Pitxot, Descharnes y Dom¨¦nech aseguran tener la conciencia tranquila: "Cumplimos con la voluntad del artista y adem¨¢s hemos conseguido que obra desperdigada vuelva a Espa?a y que no se haya vendido nada. Algunos de los que nos atacan lo hacen porque saben que somos los responsables de sustraer la obra a la corriente del dinero, neg¨¢ndonos a ninguna componenda comercial".
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