Historiador y polemista

El historiador, catedr¨¢tico y pol¨ªtico Claudio S¨¢nchez Albornoz es reconocido como el mejor medievalista espa?ol y ha sido maestro de una generaci¨®n de investigadores. Historiador y polemista, los dos temas centrales que caracterizan toda su obra son: por un lado, la Espa?a anterior a la Reconquista, y, por otro, la cultura isl¨¢mica en la pen¨ªnsula. En este segundo campo, mantuvo durante 40 a?os una pol¨¦mica de gran alcance con Am¨¦rico Castro.Tambi¨¦n tuvo S¨¢nchez Albornoz una amplia actividad pol¨ªtica y lleg¨® a ser ministro durante la Segunda Rep¨²blica. Despu¨¦s de la guerra civil vendr¨ªa el exilio, en Argentina, donde prosigui¨® sus instigaciones. Cuando en 1976 S¨¢nchez Albornoz volvi¨® brevemente a Espa?a, lo hizo para declarar la necesidad de una mayor convivencia entre los espa?oles de la que ¨¦l hab¨ªa conocido en su ¨¦poca de actividad pol¨ªtica. Su definitivo regreso a Espa?a se produjo el 30 de julio de 1983.

S¨¢nchez Albornoz inici¨® sus actividades pol¨ªticas cuando se produjo la admisi¨®n por el Rey Alfonso XIII de la dictadura de Primo de Rivera, lo que provoc¨® que manifestase su adhesi¨®n a la causa republicana, a la que ha permaneci¨® fiel a lo largo de toda su larga vida.

Miembro del partido Acci¨®n Republicana, fue elegido diputado en el primer Parlamento de la II Rep¨²blica y desarroll¨® durante esta etapa una gran actividad pol¨ªtica; entre otros, desempe?¨® los cargos de consejero de Instrucci¨®n P¨²blica, rector de la Universidad de Madrid, vicepresidente de las Cortes y, en 1933, ministro de Relaciones Exteriores.

El 15 de mayo de 1936 fue nombrado embajador en Lisboa, donde permaneci¨® hasta que el gobierno portugu¨¦s rompi¨® relaciones con el de Madrid, en oto?o del mismo a?o. La guerra civil le llev¨® primero a Francia -donde consigui¨® una c¨¢tedra en la universidad de Burdeos y comenz¨® su obra En torno a los or¨ªgenes del feudalismo- y despu¨¦s, ante la ocupaci¨®n alemana, decidi¨® viajar a Argentina.

En Argentina S¨¢nchez Albornoz se consagr¨® por entero a la investigaci¨®n. Fund¨® la revista Cuadernos de la Historia de Espa?a, punto de reuni¨®n para especialistas en los estudios medievalistas espa?oles.

En 1959 S¨¢nchez Albornoz fue nombrado presidente del Gobierno de la Rep¨²blica en el exilio, cargo que ostenta hasta 1970.

S¨¢nchez Albornoz, tras 39 a?os de exilio, regres¨¦ a Madrid el 23 de abril de 1976. En aquella ocasi¨®n declarar¨ªa "Yo no tengo de rojo m¨¢s que la corbata". Pero en tono mas serio agreg¨®: "no tengo mas que una palabra: paz. Nos hemos matado ya demasiado; entend¨¢monos en un r¨¦gimen de libertad, poniendo todo de nuestra parte, lo que sea necesario de un lado y de otro de la barricada ... Hay que hacer una Espa?a nueva entre todos los espa?oles".

Durante los setenta d¨ªas que permaneci¨® en el pa¨ªs pronunci¨® el discurso de ingreso como acad¨¦mico de n¨²mero de la Real Academia de la Historia; le fue tributado un homenaje oficial por la Universidad Complutense; fue investido doctor honoris causa, por la Universidad de Oviedo y fue recibido por el Rey Juan Carlos, en su residencia del palacio de la Zarzuela.