Sorpresa en Bruselas al conocerse la propuesta espa?ola en materia agr¨ªcola y arancelaria

Las nuevas propuestas en materia agr¨ªcola y de desarme arancelario para la industria, que present¨® ayer Espa?a a la CEE por ventanilla, antes de la sesi¨®n de negociaci¨®n que se desarrollar¨¢ hoy en Bruselas, han sorprendido y desorientado a los medios comunitarios consultados. Ante las presiones de algunos colectivos nacionales, Espa?a parece desdecirse en diversos aspectos del preacuerdo logrado en Luxemburgo el pasado 20 de junio. El propio ministro espa?ol de Asuntos Exteriores, Fernando Mor¨¢n, declar¨® ayer que "las posiciones iniciales est¨¢n bastante separadas" de cara a la sesi¨®n de hoy, aunque `esperamos, eventualmente, negociar".

Mor¨¢n se entrevist¨® ayer con el presidente de la Comisi¨®n Europea, Gaston Thorn, y con los comisarios encargados de la ampliaci¨®n, Lorenzo Natali,y de las relaciones con el Tercer Mundo, Edgard Pisani, con el que habl¨® de posibles proyectos comunes en Am¨¦rica Latina entre Espa?a y la CEE.Antes Espa?a hab¨ªa presentado un nuevo documento sobre desarme arancelario frente a la CEE, en el que se pide un per¨ªodo transitorio de siete a?os, con una reducci¨®n m¨¢s lenta al principio que al final de las protecciones arancelarias (10% con la adhesi¨®n, otro tanto en cada uno de los tres primeros a?os, y 15% anual en los cuatro a?os restantes). La CEE ofrec¨ªa seis a?os, con una reducci¨®n arancelaria equivalente al 55% en los dos primeros a?os). Frente a lo ocurrido en Luxemburgo, por lo que respecta a los productos con aranceles m¨¢s elevados -es decir, principalmente autom¨®viles y electrodom¨¦sticos-, no existe raz¨®n, seg¨²n Espa?a, para "descrestarlos" o reducirlos m¨¢s r¨¢pidamente que los otros. Ayer mismo, los brit¨¢nicos se quejaron de que sus coches entraban en Espa?a con arancel del 36%, y los espa?oles en Gran Breta?a con un gravamen del 4%.

En cuanto a la agricultura, Espa?a pide un per¨ªodo de transici¨®n d.e siete a?os (salvo diez a?os para el control de los intercambios comerciales, la cl¨¢usula de salvaguardia y la supresi¨®n de las ayudas nacionales incompatibles con la CEE). Para las frutas y hortalizas, Espa?a aceptar¨ªa el sistema de una primerafase (ahora llamada de verificaci¨®n de la convergencia), siempre que cuatro a?os fuera un plazo m¨¢ximo (es decir, reducible) y que no estuvieran incluidos los agrios. "Hemos c¨®mpletado y corregido la postura de Luxemburgo para defender intereses espa?oles", manifest¨® ayer Mor¨¢n.

Espa?a plantea adem¨¢s limitar la importaci¨®n de algunos productos hortofrut¨ªcolas de los diez que son sensibles en Espa?a, como las peras y manzanas, los esp¨¢rragos, las cebollas y los pepinos. Pide que la CEE d¨¦ la lista de sus productos sensibles e insiste en un sistema de contingentes a la importaci¨®n en Espa?a de productos continentales (l¨¢cteos, c¨¢rnicos, cereales y otros) en los que Espa?a es poco competitiva.

"Espa?a da marcha atr¨¢s respecto a lo acordado en Luxemburgo", se?alaron fuentes comunitarias al filtrar el contenido de estos dos breves documentos espa?oles. "Sabemos que se trata de una t¨¢ctica", a?adieron, "pero no llegamos. a entender bien cu¨¢l".

Espa?a -o, al menos, el Ministerio de Agricultura- no quiere entrar a negociar de verdad el.cap¨ªtulo agr¨ªcola mientras falten las declaraciones de la CEE sobre el vino y el aceite de oliva, productos que los ministros de Asuntos Exteriores debatieron ayer. El ministro franc¨¦s de Asuntos Europeos, Roland Dumas, f¨²e claro: si no se reforma la normativa comunitaria para el vino antes del 30 de septiembre, las negociaciones con Espa?a no podr¨¢n proseguir. Dumas se present¨® como palad¨ªn de los intereses espa?oles -se habr¨¢ visto todo- al afirmar que no se puede ofrecer a Espa?a una propue-sta discriminatoria.

A la sombra de una cosechar¨¦cord este a?o en la CEE y del ingreso de Espa?a, Francia quiere -frente a la oposici¨®n italianaimplantar una penalizaci¨®n de los rendimientos excesivos y de los excedentes en los doce, cuando la productividad vitivin¨ªcola espa?ola es muy inferior a la comunitaria. Claro que las ofertas italianas tampoco son brillantes para Espa?a.

El aceite de oliva

Con respecto al aceite de oliva, Londres insisti¨® en introducir, para evitar el gasto de fondos comunitarios, niveles m¨¢ximos de producci¨®n a precios garantizados por la CEE. No est¨¢ claro si esta reforma habr¨ªa de intervenir antes o despu¨¦s de la adhesi¨®n de Espa?a.

Los diez, por otra parte, ultimaron la oferta en materia institucional que har¨¢n hoy a Espa?a: un estatuto de pa¨ªs intermedio. Espa?a, en el Consejo de Ministros de la CEE, dispondr¨ªa de ocho de un total de 76 votos. En el bloqueo a una decisi¨®n intervendr¨ªa con 23 votos contrarios. En c¨²alqujer caso, este asunto ser¨¢ tambi¨¦n examinado por el comit¨¦ especial, a¨²n no formado, que ha de reexaminar el desarrollo pol¨ªtico de la Comunidad y el funcionamiento de sus instituciones. Espa?a, si se confirma la tendencia mayoritaria, podr¨ªa bloquear decisiones con el apoyo de Italia y Grecia, pa¨ªses con los que tiene intereses comunes. Espa?a, por otra parte, gozar¨¢ de dos comisarios en la Comisi¨®n Europea, con un estatuto de pa¨ªs grande en este caso. Pero este punto, que constituye un acuerdo pol¨ªtico, no quedar¨¢ registrado en el documento. Los diez, por otra parte, volvieron a abordar el modo de hacer frente a la crisis presupuestaria de la CEE en este a?o mismo de 1984. Sin resultado, pues Gran Breta?a insiste en que antes de pensar en gastar m¨¢s hay que recortar la partida agr¨ªcola.