Israel trata de apoderarse de un r¨ªo en el sur de L¨ªbano, denuncian los vecinos
Israel parece haber modificado ligeramente su frontera septentrional con L¨ªbano para apoderarse de un r¨ªo cuyas aguas ser¨ªan desviadas hacia su territorio, seg¨²n los habitantes de la zona afectada, cuyas acusaciones fueron, sin embargo, rotundamente desmentidas por un portavoz de Tel Aviv.Concretamente, el cuerpo de ingenieros militares israel¨ªes empez¨® hace un mes la construcci¨®n en el sur del L¨ªbano ocupado de una carretera dotada de cercas y alambradas, que a¨ªsla una decena de kil¨®meros cuadrados del territorio liban¨¦s donde nace el Wazzani, afluente del Jord¨¢n, que recibe las aguas del Hasbani.
Las obras llevadas a cabo por los israel¨ªes s¨®lo sirven, seg¨²n se?alaron fuentes castrenses en la capital del Estado jud¨ªo, para arreglar las alambradas y dem¨¢s instalaciones que impiden, en una franja de varios kil¨®metros de profundidad, las infiltraciones de terroristas a trav¨¦s del conf¨ªn.
Pero d¨ªas antes, el influyente diario hebreo Haaretz revel¨® que las autoridades hidr¨¢ulicas israel¨ªes hab¨ªan decidido utilizar para el transporte de agua parte del oleoducto Tapline (Transarabic Pipeline), que atraviesa el Gol¨¢n sirio ocupado, y que dej¨® de funcionar al iniciarse la guerra de los seis d¨ªas, en 1967.
A trav¨¦s del oleoducto ser¨ªa desviado hacia Israel el cauce del Hasbani, seg¨²n el diario, aunque algunos expertos opinan que el Tapline bombear¨ªa m¨¢s bien el caudal m¨¢s abundante del Wazzani.
Alarmado por las aparentes intenciones de su vecino meridional, el Gobierno liban¨¦s pidi¨® a los cascos azules desplegados en el sur del pa¨ªs que investigasen los hechos, pero el Ej¨¦rcito israel¨ª impidi¨® el acceso a la zona a los soldados de la ONU, seg¨²n denunci¨® a principios de semana el portavoz de la fuerza provisional de las Naciones Unidas en L¨ªbano.
La escasez de recursos hidr¨¢ulicos es uno de los m¨¢s acuciantes problemas de Israel, que consume anualmente el 99,9% del agua potable disponible y que podr¨ªa padecer una grave penuria en los pr¨®ximos a?os.
Las autoridades israel¨ªes intentan prevenir esa situaci¨®n mediante campa?as de ahorro, sistemas de regad¨ªo, lagos artificiales e industrias de desalinizaci¨®n y, probablemente tambi¨¦n, elaborando proyectos para robar el agua a sus vecinos.
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