Sensible mejor¨ªa de la ni?a herida en un atentado terrorista en Las Arenas
Eva Mar¨ªa Ferreiro, la ni?a de nueve a?os que result¨® gravemente herida hace dos semanas en un ataque de ETA contra el cuartel de la Guardia Civil en la localidad vizca¨ªna de Las Arenas, ha experimentado una sensible mejor¨ªa en los ¨²ltimos d¨ªas, y hoy mismo comenzar¨¢ sus ejercicios de recuperaci¨®n.Eva Mar¨ªa ha comenzado a mover el pie izquierdo y los dedos de la mano del mismo lado, por lo que -seg¨²n la impresi¨®n de los m¨¦dicos que transmiti¨® a este peri¨®dico el padre de la ni?a, un brigada de la Guardia Civil- se espera una gradual recuperaci¨®n funcional de sus extremidades.
El costado izquierdo de la peque?a qued¨® parcialmente paralizado tras el atentado, en el que es tall¨® una granada de mano lanzada por un comando de ETA.
La ni?a, que perdi¨® el conocimiento tras el atentado, lo recuper¨® cuando era trasladada, en el coche particular de un guardia civil, al hospital de Cruces. Sus primeras palabras, que luego ha repetido alguna vez en sue?os, fueron: "Enrique, la bomba". Enrique es el nombre del guardia civil que instantes antes de que se produjera el impacto de la granada se encontraba a la puerta del cuartel, conversando con Eva Mar¨ªa, que en esos momentos jugaba con su bicicleta en la explanada exterior del recinto.
Eva Mar¨ªa Ferreiro permaneci¨® durante varios d¨ªas inconsciente tras la delicad¨ªsima operaci¨®n a que fue sometida -padec¨ªa fractura de cr¨¢neo con salida de masa encef¨¢lica- en la madrugada del d¨ªa 19 de agosto. A partir de mediados de la semana siguiente, fue recuperando la consciencia y comenz¨® reconociendo a sus padres, a su hermana mayor, Lourdes, as¨ª como a los m¨¦dicos y enfermeras que la atienden.
Sin embargo, la m¨¢xima preocupaci¨®n de su padre reside actualmente en las posibles secuelas que el drama padecido pueda dejar en la mente de la ni?a: "Cada hora, m¨¢s o menos, cuando se despierta, se aferra a su madre o a m¨ª pidi¨¦ndonos a gritos que no la dejemos sola".
Explicar lo sucedido
Manuel Ferreiro considera que es obligaci¨®n suya explicar a su hija todo lo sucedido. Est¨¢ guardando, para ello, todos los recortes de los art¨ªculos que han ido apareciendo en la Prensa en relaci¨®n con el atentado y el estado de Eva Mar¨ªa, pero no se los mostrar¨¢ a su hija ni hablar¨¢ del asunto "hasta que los m¨¦dicos me aseguren que el choque que pueda producirle recordar los hechos no va a tener efectos negativos para su mente.Eva Mar¨ªa Ferreiro come con buen apetito y es ya capaz de incorporarse y permanecer sentada en su cama. Hace cuatro o cinco d¨ªas le fueron retiradas las sondas, lo que le permite moverse con mayor libertad.
La ni?a, junto con su hermana, de 16 a?os, y su madre, vive durante el curso escolar en La Coru?a, ciudad de la que es natural toda la familia. Acabado el curso, las tres mujeres se hab¨ªan desplazado a Las Arenas para pasar junto al padre de familia las vacaciones de verano.
La habitaci¨®n de Eva Mar¨ªa, que el martes pasado abandon¨® la unidad de cuidados intensivos, se encuentra llena de ramos de flores y juguetes enviados desde toda Espa?a.
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