Dos militares marroqu¨ªes, llevados a Lanzarote en el pesquero espa?ol que intentaban detener

Un teniente y un soldado del Ej¨¦rcito marroqu¨ª llegaron en la madrugada del pasado lunes al puerto de Arrecife de Lanzarote a bordo del pesquero Santa Teresa de Jes¨²s, a quien ambos militares hab¨ªan abordado para conducirlo al puerto de Agadir. El capit¨¢n del pesquero aprovech¨® un momento en que los militares dorm¨ªan para poner rumbo a Lanzarote. El asunto se halla en manos de la Secretar¨ªa General de Pesca y del Ministerio de Asuntos Exteriores.

La Guardia Civil manifest¨® ignorar si, caso de que efectivamente se hubieran dormido dichos militares, esto podr¨ªa haberse debido a que se les hubiese suministrado licor u otra sustancia que les adormilase. El ins¨®lito caso se produjo cuando el barco, con diez tripulantes, faenaba en Punta Stanford, a unas seis millas y media de la costa sahariana.El pesquero fue abordado por el buque patrullero de la armada marroqu¨ª A. A. Ayachi numeral 404 -informa la Comandancia de Marina de Canarias. El teniente Rhanemi Abdallahk, de 28 a?os, y el soldado Lahbili Abdekrim, de 25, subieron, metralleta en mano, a bordo del pesquero espa?ol. Seg¨²n declar¨® el patr¨®n del barco alicantino, el teniente marroqu¨ª le solicit¨® la documentaci¨®n que le autorizaba a pescar. Una vez que se le facilit¨®, el teniente marroqu¨ª afirm¨® que la documentaci¨®n era falsa.

El teniente y el soldado, metralleta en ristre, obligaron al capit¨¢n a poner rumbo al puerto de Agadir. Una vez en camino, el capit¨¢n del pesquero comprob¨® que empezaba a escasear el combustible cuando le quedaban unas 36 horas para arribar al citado puerto marroqu¨ª, seg¨²n el relato del patr¨®n a la Guardia Civil. En un momento determinado, aprovechando que los militares marroqu¨ªes estaban durmiendo, el patr¨®n decidi¨® poner rumbo a Arrecife de Lanzarote, en cuyo puerto entraron a las 3.45 de la madrugada de ayer sin poner en conocimiento del oficial marroqu¨ª su decisi¨®n.

Ante el asombro de las personas que estaban en el muelle lanzarote?o, los militares marroqu¨ªes aparecieron en la cubierta del pesquero portando sus metralletas, pero poco despu¨¦s llegaron hasta el buque las autoridades de Marina y fuerzas de la Guardia Civil, que conversaron con el teniente Abdallahk. Fuentes de la Guardia Civil manifestaron, que el oficial marroqu¨ª accedi¨® amablemente a entregar sus armas, no sin mostrar su perplejidad por lo ocurrido.

El teniente y el soldado marroqu¨ªes fueron conducidos al acuartelamiento de la Guardia Civil en la isla, donde fueron depositadas sus armas, por las que se les proporcion¨® un recibo justificante. El teniente fue invitado a alojarse en la residencia de oficiales en el batall¨®n canarias 50 del Ej¨¦rcito de Tierra en Lanzarote y el soldado ha sido acogido en las dependencias de los reclutas. Ambos militares han confesado estar muy, extra?ados pero al mismo tiempo muy satisfechos del trato recibido de las autoridades espa?olas. Los dos militares se mueven por Arrecife con toda libertad entre la general curiosidad de los isle?os.

Las autoridades de Marina han abierto una investigaci¨®n para aclarar lo ocurrido.