Las canciones de Luis Eduardo Aute

Como es sabido, durante tres d¨ªas consecutivos el cantautor Luis Eduardo Aute ha dado un recital en el Parque de Atracciones de Madrid. Yo estuve all¨ª y, aunque no me considero un experto en ning¨²n tipo de m¨²sica, quisiera hacer part¨ªcipes a los lectores de este peri¨®dico de algunas reflexiones que me suscit¨® la asistencia al acto.La obra de Aute, cuya calidad no pretendo poner en cuesti¨®n, me parece inspirada por una filosof¨ªa bastante poco consistente, a medio camino de Nietzsche y Sartre. Creo que la frase que mejor sintetiza esta concepci¨®n de la vida es el "comamos y bebamos, que ma?ana moriremos". Hedonismo y pesimismo inspiran todas sus canciones, en las cuales el amor se entiende, o como una experiencia orgi¨¢stica o como un sentimiento intenso que igual que viene se desvanece, y la muerte, "la m¨¢s inmutable raz¨®n", viene a confirmar lo absurdo de la existencia: "vendr¨¢ la noche m¨¢s larga".Conozco personalmente a mucha gente que acudi¨® al acto y nunca se ident¨ªficar¨ªa con estas ideas, aunque en general se trataba de un p¨²blico de pasotas, progres, alucinados y similares. Sin embargo, mediante h¨¢biles t¨¦cnicas de direcci¨®n de multitudes,. se consigui¨® que todos los espectadores vibraran al un¨ªsono con letras. que no resisten el menor an¨¢lisis racional, o que se coreara Al alba casi como si se tratara de un himno religioso. Al final, todo el mundo "otra, otra", y el se?or Aute ri¨¦ndose de todos.

Los ideales de una juventud sin ideales, o bien los est¨ªmulos por los que se mueven unos j¨®venes que no piensan, que se anajenan una y mil veces en espect¨¢culos de este tipo. A esta juventud va dirigida esta carta, que sale de la mano de un joven como ellos y que espero les sirva al menos como motivo de reflexi¨®n.-