Dos magistrados, decididos a que la ley se cumpla
Dos magistrados, titulares de sendos juzgados de primera instancia de Madrid, Manuela Carmena Castrillo y Rom¨¢n Garc¨ªa Varela, est¨¢n decididos a algo aparentemente obvio: que la ley se cumpla tambi¨¦n en las oficinas judiciales. Contra las resistencias de todo tipo con las que tropiezan en su empe?o, que ellos no creen ni desean ¨²nico, Manuela Carmena reafirma su voluntad de "no dejarnos enga?ar", dice, "por quienes s¨®lo defienden privilegios econ¨®micos de hecho y comodidades corporativas acu?adas en los largos a?os oscuros en que en este pa¨ªs no hab¨ªa libertad".Tanto para una como para otro magistrado, ambos pertenecientes a la corriente judicial progresista Jueces para la Democracia, la soluci¨®n radical a estos problemas se producir¨¢ cuando la justicia sea enteramente gratuita, instante en que, seg¨²n Rom¨¢n Garc¨ªa, "aumentar¨¢ la credibilidad en el medio judicial". Pero mientras eso ocurre, Manuela Carmena considera que el precio que los ciudadanos pagan al Estado por el servicio de la justicia ha de ajustarse a "las garant¨ªas legales existentes para que las tasas judiciales sean claras y precisas y eviten el fraude".
Por su parte, Rom¨¢n Garc¨ªa se?ala que, frente al "oscurantismo terminol¨®gico e interpretativo de muchas disposiciones legales, es preciso que el l¨®gico temor del justiciable no afecte tambi¨¦n a preceptos tan claramente expresados como el art¨ªculo 119 de la Constituci¨®n, que proclama que la justicia ser¨¢ gratuita, en todo caso, respecto de los que acrediten insuficiencia de recursos".
El magistrado resalta igualmente la necesidad de que los ciudadanos que en la actualidad tienen derecho a litigar gratuitamente -aquellos con unos ingresos o recursos econ¨®micos que no superen el doble del salario m¨ªnimo interprofesional- sepan que los beneficios de la gratuidad se extienden tambi¨¦n a "la exenci¨®n del pago de toda clase de derechos o tasas judiciales, reintegro del papel usado para su defensa, inserci¨®n en los peri¨®dicos oficiales de los anuncios necesarios, etc¨¦tera".
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