Cinco reclusos secuestraron a sus guardianes y al capit¨¢n del barco que les conduc¨ªa a PaIma

El capit¨¢n del barco de la compa?¨ªa Transmediterr¨¢nea Ciudad de Salamanca, Lorenzo Moranta Soc¨ªas, fue rescatado a las 8.45 horas de ayer por efectivos de la Guardia Civil, en una c¨¦ntrica calle de Palma, despu¨¦s de haber sido tomado como reh¨¦n por cinco reclusos que viajaban a bordo del buque, que se dirig¨ªa desde Valencia a la capital balear, a donde eran trasladados para ser juzgados por diversos delitos. Los cinco delincuentes, cuatro espa?oles y un portugu¨¦s, hab¨ªan desarmado a los tres guardias civiles que les custodiaban, sobre las 3.30 horas de la madrugada, y exigieron mantener como reh¨¦n al capit¨¢n Moranta para garantizar su huida, que fue abortada tras una espectacular persecuci¨®n en autom¨®vil.

El telegrafista del barco comunic¨® a la compa?¨ªa, en Valencia, lo que estaba ocurriendo. De este modo, cuando el Ciudad de Salamanca arrib¨® a Palma de Mallorca la Guardia Civil ya hab¨ªa preparado una operaci¨®n de rescate. Los cinco reclusos son Jaime Feliciano Ramiro Bruned, al parecer jefe de la operaci¨®n, de unos 30 a?os de edad, el portugu¨¦s Juan Jos¨¦ Ferreira M¨¢rquez, Dionisio Rodr¨ªguez S¨¢nchez, Luis Contreras Moreno y Antonio G¨®mez Est¨¦vez, delincuentes con numerosos antecedentes, seg¨²n informa Jaime Millas desde Valencia.

El pasaje no se enter¨®

El Ciudad de Salamanca hab¨ªa zarpado del puerto de El Grao a las 23.45 horas del martes, con cinco reclusos que eran trasladados a Palma para ser juzgados en esta capital, y un n¨²mero de pasajeros no determinado. A las 3.30 horas de ayer los reclusos llamaron a uno de los tres guardias civiles que les custodiaban para pedirle unas cervezas. Uno de los delincuentes portaba un punz¨®n con el que atac¨® al guardia, produci¨¦ndole cortes en la cara y el cuello, y le desarm¨®, arrebat¨¢ndole su subfusil Z-70. A continuaci¨®n, los reclusos controlaron a los otros dos guardias civiles, encerr¨¢ndo les en su celda despu¨¦s de inmovilizarles con las esposas de reglamento.Un camarero que estaba de guardia observ¨® los incidentes y, a requerimiento de los reclusos, fue a comunicar lo que ocurr¨ªa al capita?n los delicuentes reclamaron su presencia y le hicieron creer que hab¨ªan matado a uo de los guardias. Moranta intent¨® negociar con los reclusos, despu¨¦s de dar la orden de que no se alertara ni a la tripulaci¨®n ni al pasaje, con la excepci¨®n de los oficiales. El pasaje permaneci¨® ajeno a los sucesos, incluso despu¨¦s de desembarcar en el puerto de Palma, sobre las 8.35 horas.

Al parecer, durante la maniobra de atraque del Ciudad de Salamanca, los presos comunicaron a las fuerzas de seguridad que saldr¨ªan por la rampa de desembarque de veh¨ªculos, con el capit¨¢n Moranta como reh¨¦n, en el Simca 1200 de su propiedad y conducido por ¨¦l mismo, con la idea de huir por carretera. Sin embargo, s¨®lo dos de los cinco reclusos salieranon el coche y abandonaran el barco junto con Moranta, a quien manten¨ªan enca?onado con las armas sustra¨ªdas a los guardias civiles. Agentes de paisano detuvieron a los tres restantes: uno de ellos cuando intentaba escaparmezclado entre el pasaje; otro, escondido debajo de una cama del barco; y el tercero se entreg¨®. ?ste ¨²ltimo, seg¨²n el jefe de la comandancia de la Guardia Civil de Palma, hab¨ªa decidido no participar en el secuestro, pero ten¨ªa miedo de sus compa?eros.

Dos autom¨®viles camu?ados, ocupados por guardias civiles, iniciaron la persecuci¨®n del Simca por las calles m¨¢s c¨¦ntricas y concurridas de Palma. El intenso tr¨¢fico permiti¨® la detenci¨®n de los fugados y el rescate sin lesiones del capit¨¢n Moranta. En vista de que no pod¨ªan avanzar a causa de un atasco, los dos reclusos decidieron, sobre las 8.45 horas, abandonar el veh¨ªculo y a su reh¨¦n, con las armas en la mano, que no llegaron a usar porque fueron detenidos inmediatamente. Tampoco los guardias abrieron fuego. "Fue sorprendente lo r¨¢pido que se produjeron los acontecimientos y no hubo que recurrir a abrir fuego, aunque es posible que las personas que transitaban por el lugar sintiesen cierto p¨¢nico", declar¨® el teniente coronel Fernando Nieva, jefe de la comandancia de la Guardia Civil de Palma.

El capit¨¢n Lorenzo Moranta, mallorqu¨ªn de 39 a?os, regres¨® a su barco a las 9.03 horas. Al mediod¨ªa el Ciudad de Salamanca zarp¨® rumbo a Valencia. Moranta dijo a este peri¨®dico que "ha sido una persecuci¨®n espectacular. Lo he pasado fatal, pero afortunadamente no me ha ocurrido nada. Me estaban apuntando con las armas todo el tiempo y no sab¨ªa lo que quer¨ªan hacer conmigo".