La Fundaci¨®n Adenauer reuni¨® a pol¨ªticos democristianos y a intelectuales en un seminario celebrado en Lanzarote

ENVIADA ESPECIAL

Un seminario sobre el papel del intelectual en la sociedad democr¨¢tica y la pol¨ªtica cultural, organizado por la Fundaci¨®n Konrad Adenauer, se ha celebrado en Lanzarote entre los d¨ªas 25 y 28 de este mes. Al encuentro, desarrollado en un hotel de cinco estrellas de la isla, han asistido cinco miembros del Partido Dem¨®crata Popular -incluido su presidente, ?scar Alzaga-, junto a catedr¨¢ticos, artistas, escritores y periodistas, hasta un total de 26 personas. La Fundaci¨®n Adenauer, creada en 1964 seg¨²n los principios de actuaci¨®n pol¨ªtica y social del que fuera canciller de la Rep¨²blica Federal de Alemania, dispone de un presupuesto de 7.500 millones de pesetas anuales -fruto de aportaciones estatales y privadas- para potenciar un determinado modelo de desarrollo en el mundo.

El revuelo period¨ªstico que ha provocado el esc¨¢ndalo Flick en Espa?a ha vuelto algo m¨¢s receloso con la Prensa al director de la oficina de la Fundaci¨®n Adenauer en Madrid, Bernhard Hagemeyer, que se ha cansado de explicar una y mil veces que "nosotros s¨®lo recibimos una vez 500.000 pesetas de Flick para organizar un seminario en Alemania". Porque los seminarios y encuentros de diverso tipo son, al parecer, una de las principales misiones de este organismo, que cuenta con 400 empleados en la propia RFA -"somos como un ministerio", puntualiza Hagemeyer-, a los que hay que sumar 30 personas en Am¨¦rica Latina y los cargos que atienden las 10 oficinas abiertas en ciudades europeas y en Estados Unidos.

Cinco seminarios

El a?o 1984 concluir¨¢ para la Fundaci¨®n Adenauer en Espa?a con un saldo de cinco seminarios celebrados -dos de ellos est¨¢n programados para el pr¨®ximo mes de diciembre- sobre temas tales como la empresa p¨²blica, Espa?a en Europa, modelos de sociedad o el intelectual en la sociedad democr¨¢tica. El objetivo de estas actividades lo resume Hagemeyer en el abstracto inter¨¦s de la fundaci¨®n por lograr la integraci¨®n definitiva de Espa?a en Europa como una democracia firmemente consolidada. En su peculiar castellano, adquirido durante 11 a?os de peregrinaje profesional por Am¨¦rica Latina y Espa?a, el director de la Fundaci¨®n Adenauer en Madrid explica: "Nosotros colaboramos, seg¨²n las necesidades que los espa?oles nos apuntan". Los espa?oles son, en este caso, los miembros de la fundaci¨®n dem¨®crata cristiana Humanismo y Democracia, que preside Fernando ?lvarez de Miranda, y uno de cuyos representantes, el historiador Javier Tusell, ha colaborado en la organizaci¨®n de las jornadas de Lanzarote.Tanto Tusell como Hagemeyer se lamentan de la dificultades para hacer participar en el seminario a personas de un ampl¨ªo espectro ideol¨®gico. "Las listas han sufrido retoques hasta ¨²ltima hora, porque la gente va cambiando de parecer y al final te avisan de que no vienen con menos de 24 horas de plazo", se?ala Tusell.

"La democracia cristiana alemana, que no tiene ning¨²n signo religioso, ha pagado muy caro el alejamiento que se produjo en un momento dado entre el partido y los intelectuales", seg¨²n confiesa Bernhard Hagemeyer. Por tanto, y como se?ala el folleto divulgador editado por la Adenauer en castellano, es buena cualquier oportunidad que permita "una apertura al di¨¢logo entre personas, instituciones y partidos sobre una base dem¨®crata cristiana". En este sentido, el director de la fundaci¨®n en Espa?a explica su intenci¨®n, hasta ahora frustrada, de organizar un seminario con militares. Todos tienen algo que decir, opina Hagemeyer, en este pa¨ªs que pese a todo se desarrolla y avanza.

La Fundaci¨®n Adenauer viene cumpliendo tambi¨¦n, a trav¨¦s de uno de los ocho institutos que la integran, Solidaridad Internacional, una labor de "ayuda material y espiritual" a los pa¨ªses del denominado Tercer Mundo. Esos institutos dedican a esta tarea la mayor parte de sus recursos, que se destinan tambi¨¦n al estudio de la pol¨ªtica de seguridad, el papel de la democracia cristiana a lo largo de la historia o el mantenimiento de un contacto activo y permanente con sus socios pol¨ªticos en Europa y Estados Unidos".

El esfuerzo de la Fundaci¨®n Adenauer por comprender la compleja realidad del mundo es evidentemente caro. En el caso concreto de las jornadas celebradas en Lanzarote, el presupuesto puede subir por encima de los dos millones de pesetas, mientras que los resultados pertenecen a un discutible terreno casi metaf¨ªsico.