Desmontar o destruir
El secretario general de la cadena de hoteles Meli¨¢, administradora del hotel Torremolinos -aunque en aquel tiempo se llamaba Tres Carabelas-, que pertenece a la sociedad Intusa, manifest¨® que el juicio no comenzar¨¢ el pr¨®ximo 15 de enero, como se ha dicho, sino que en realidad empez¨® en septiembre de 1963, cuando fue emitida la primera de las cuatro sentencias judiciales que se han producido hasta la fecha sobre este mismo asunto.La escultura fue comprada a Pablo Serrano en mayo de 1962 y estaba destinada a la escalera de caracol del vest¨ªbulo principal del hotel, donde fue instalada. Pero la empresa decidi¨® realizar ciertos cambios en el hotel, imposibles si se manten¨ªa la escultura en el mismo lugar para el que fue pensada en un primer momento. Bay¨®n, quien dijo que no pertenec¨ªa a la empresa en aquellas fechas, asegur¨® que ¨¦sta hab¨ªa estudiado incluso la posibilidad de no hacer los cambios para no quitar la escultura. Decidido el cambio, se opt¨® por desmontar -que no destruir la escultura, seg¨²n precis¨® el mismo portavoz. La escultura se dej¨® en un almac¨¦n de la compa?¨ªa, aunque el portavoz no sabe "si permanece en dicho almac¨¦n".
Interpuesta la primera reclamaci¨®n por Pablo Serrano ante el juzgado de primera instancia, en petici¨®n del reconocimiento del derecho a la propiedad art¨ªstica, el juzgado emiti¨® sentencia desestimatoria para la petici¨®n de Serrano el 9 de septiembre de 1963.
El escultor decidi¨® entonces apelar ante la Audiencia Territorial de Madrid y ¨¦sta emiti¨® sentencia desestimatoria el 6 de mayo de 1964. Presentado recurso ante el Tribunal Supremo, se produjo sentencia, nuevamente desfavorable para Serrano, el 21 de junio de 1965.
La Constituci¨®n fue aprobada el 6 de diciembre de 1978; en ella se reconoce el derecho a la producci¨®n y creaci¨®n art¨ªstica, por lo que Pablo Serrano present¨® nueva demanda ante el Juzgado de Primera Instancia n¨²mero 3 de Madrid, por presunta violaci¨®n de ese derecho constitucional. El juzgado tambi¨¦n emiti¨® sentencia desestimatoria.
El portavoz de la cadena Meli¨¢ no supo precisar si se hab¨ªa comunicado a Pablo Serrano que se iba a desmontar su escultura. "Han pasado muchos a?os, aunque me extra?ar¨ªa que no lo supiera", coment¨®.
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