Manifestaci¨®n anti-OTAN

En la p¨¢gina 15 de EL PAIS del 3 de diciembre ven¨ªa la noticia de la manifestaci¨®n celebrada en Valencia pidiendo la salida de la OTAN. O cambian ustedes de corresponsal o le dan un tir¨®n de orejas. (Ni una cosa ni otra, dir¨¢ usted.) Es cierto que los convocantes de la manifestaci¨®n valenciana estimaron en 30.000 las personas necesarias para formar la cadena humana que se hab¨ªa previsto como fase primera de la manifestaci¨®n. Si su corresponsal se hubiera molestado en salir a la calle para ver lo que pasaba, hubiera podido comprobar que la cadena, a las 12 horas, momento previsto, era doble y triple en muchos lugares, y en todas partes ondulante. Quiero decir que no Cubr¨ªa el camino m¨¢s corto entre dos puntos. Por tanto, las 30.000 personas m¨ªnimamente necesarias eran much¨ªsimas m¨¢s. Y si a su inefable corresponsal tanto cr¨¦dito le merecen los convocantes, mejor hubiera hecho en recoger la estimaci¨®n de asistentes hecha por los convocantes, anunciada con muchos decibelios por la megafon¨ªa de la plaza del Pa¨ªs Valenciano, y que era de "m¨¢s de 100.000 asistentes". Esta cifra, que yo que estuve all¨ª considero bastante aproximada a la realidad, y dado el tradicional car¨¢cter nemanfotiste de los valencianos, es bastante importante y no debe ser hurtada al conocimiento de sus lectores. Pero comprendo que su corresponsal valenciano, en un domingo soleado, ten¨ªa otras cosas que hacer y dio la previsi¨®n m¨ªnima por la realidad del acto.Cuando en la entradilla de la noticia se habla de que los convocantes est¨¢n pr¨®ximos al PCE, me recuerda a otras noticias de delitos cometidos por gitanos. Dado por supuesto que los gitanos y los comunistas son seres humanos, con

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los mismos derechos que usted mismo pueda tener y que lo que importa no es al grupo al que se pertenece, sino lo que se hace, me parece la alusi¨®n un tanto tendenciosa. ?ramos muchos los que no estamos pr¨®ximos a ninguna de las organizaciones mencionadas, aunque coincidamos en oponemos a la carrera armamentista, a la pol¨ªtica de bloques, a la subyugaci¨®n de los pueblos por la fuerza, al enriquecimiento de unos pocos a costa de la depauperaci¨®n de muchos y tambi¨¦n a la manipulaci¨®n de la informaci¨®n.

Por ¨²ltimo, sigue usted con el falso "El debate sobre la OTAN". Y, adem¨¢s, el se?or Garc¨ªa A?overos nos amenaza con una segunda parte. Bueno, pues que le aproveche. Y esperemos, ingenuamente, que de usted cabida a opiniones y argumentos contrarios para dar verosimilitud al debate-