El arca¨ªsmo derroto al 'lendakaril'

El hecho de que Carlos Garaikoetxea cuente con un apoyo mayoritario de las bases del partido que no queda reflejado en las votaciones realizadas en la asamblea nacional es uno de los factores que han influido, hasta ahora, en el Iendakari para no presentar su dimisi¨®n. Si bien es cierto que los representantes de Vizcaya y ?lava han encendido su luz roja a las tesis del Gobierno vasco, la consulta realizada en las bases del partido, ha arrojado unos resultados que distan del veredicto que el PNV dio en la asamblea celebrada el pasado s¨¢bado en Vizcaya.El arcaico sistema de funcionamiento interno del PNV ha puesto de manifiesto una vez m¨¢s que las operaciones aritm¨¦ticas realizadas en el recuento de votos no concuerdan con el estado de ¨¢nimo de una buena parte de las bases nacionalistas. El ejemplo de ?lava es, en este sentido, muy revelador, ya que de 27 juntas tan s¨®lo siete se pronunciaron a favor de las tesis del Gobierno vasco. Sin embargo, se da la circunstancia de que estas siete juntas representan al mayor n¨²mero de afiliados (el 85%) de la provincia. Esa proporci¨®n no queda reflejada en el c¨®mputo final de las votaciones puesto que las juntas alavesas tienen id¨¦ntica representatividad independientemente del n¨²mero de afiliados que agrupen.

En Vizcaya y Guip¨²zcoa -donde la toma de postura de los afiliados, la mayor¨ªa de los vizca¨ªnos con la direcci¨®n del partido y los guipuzcoanos con Carlos Garaikoetxea, confirma la divisi¨®n territorial que aqueja al PNV- el sistema de votaci¨®n se aproxima al criterio de proporcionalidad propio de las organizaciones democr¨¢ticas.

As¨ª las cosas, el Euskadi Buru Batzar, ha comparecido ante la asamblea nacional del PNV con la frontal oposici¨®n de la militancia guipuzcoana (15 representantes), la adhesi¨®n de Vizcaya (15) y la de ?lava (15).