65 millones de pesetas, en la seccion de fotocomposici¨®n de EL PAIS
Instantes despu¨¦s de las 9.30 de la ma?ana, los trabajadores de la secci¨®n de fotocomposici¨®n de EL PAIS se enteraron de que les hab¨ªa tocado el cuarto premio del sorteo, el 4414, con 65 millones de pesetas para repartir entre 40 personas. Llamadas telef¨®nicas, gritos de alegr¨ªa y un fuerte nerviosismo presidi¨® la jornada laboral de los afortunados. Las participaciones est¨¢n homog¨¦neamente repartidas. La mayor parte de ellos ha obtenido entre uno y dos millones de pesetas. S¨®lo dos de ellos han alcanzado los cinco millones de pesetas.
Todos los componentes del turno de ma?ana siguieron tranquilamente en sus puestos de trabajo hasta la 1.30, hora en la que, como los restantes d¨ªas, bajaron a comer a la cafeter¨ªa del peri¨®dico. All¨ª todo eran risas y planes para las fiestas navide?as. "?Y d¨®nde est¨¢ Guillermo", bromeaba alguno, "porque lo mismo ha cobrado la pasta y se ha ido al Caribe".Pero no. Nada m¨¢s terminar la comida lleg¨® Guillermo Trigo, de 33 a?os, teclista del departamento, la persona que se ha encargado de comprar y distribuir los 26 d¨¦cimos del n¨²mero premiado. Pese a que hasta las nueve de la noche no empieza su turno de trabajo, no pudo resistirse a la tentaci¨®n de acercarse a abrazar a sus compa?eros.
A Guillermo Trigo, casado y padre de un hijo, le han tocado cinco millones de pesetas. Compr¨® los d¨¦cimos el pasado d¨ªa 10 en la administraci¨®n de Marcenado, aunque por los nervios o por su mala memoria no est¨¢ muy seguro de esto ¨²ltimo.
De lo que s¨ª se acuerda es de que escogi¨® a prop¨®sito el n¨²mero premiado. "Dadas las fechas ya quedaban pocos n¨²meros, y como todos los a?os, yo me hab¨ªa comprometido para comprar la loter¨ªa para la secci¨®n. La vendedora me mostr¨® dos n¨²meros y escog¨ª el que terminaba en 4. Yo estoy abonado a un n¨²mero que termina en 4 porque es una cifra que me gusta".
Se enter¨® del premio oyendo la radio sentado en su coche, seg¨²n lo cantaban las ni?as del colegio de San lldefonso. "Me puse nervios¨ªsimo. El n¨²mero me lo sab¨ªa de memoria, pero no me lo cre¨ª hasta que no lo repitieron". Se tom¨® unas ca?as de cerveza con los amigos y se vino al peri¨®dico, "porque, adem¨¢s de querer estar con los compa?eros, llevo todav¨ªa en el bolsillo las participaciones dos de ellos. ?Qu¨¦ voy a hacer con el dinero? Ni idea. Puede que me compre un piso, pero no tengo ning¨²n plan claro. Esto hay que pensarlo".
Lo cierto es que casi ninguno tiene planes especiales para gastar este dinero, salvo pasar unas fiestas lo mejor posible e incluso alguno, como Carmen Benavente, comprarse un traje maravilloso para la fiesta de Nochevieja.
Roberto Company, el jefe de la secci¨®n, al que le ha tocado un mill¨®n de pesetas, dice que no cabe pensar en planes especiales. Primero, porque no es mucho dinero, y segundo, porque la mayor parte de ellos est¨¢n endeudados por la compra de viviendas o coches. "La crisis se hab¨ªa notado en que otros a?os todos nosotros compr¨¢bamos mucha m¨¢s loter¨ªa que en esta ocasi¨®n. Ese dinero nos vendr¨¢ bien para poner al d¨ªa nuestras cuentas y pasar unas buenas Navidades. Poco m¨¢s".
Solamente tres miembros del departamento no llevaban loter¨ªa. Uno de ellos es Jos¨¦ Pedro Hern¨¢ndez, corrector, que no juega jam¨¢s "porque estoy en contra del juego institucionalizado. Pero estoy contento porque me alegro por ellos". Por la tarde, los del departamento de fotocomposici¨®n celebraron su suerte con todos los compa?eros de la casa, quienes tuvieron que conformarse con no perder el dinero, ya que correspondi¨® el reintegro del dinero jugado al n¨²mero 57166.
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