El presupuesto de Defensa para 1985 / 1
Los gastos de Defensa no son, seg¨²n explica el autor de este art¨ªculo, los que se incluyen ¨²nicamente en el apartado referido al Ministerio de Defensa, sino que a este important¨ªsimo cap¨ªtulo hay que a?adir los gastos correspondientes a otros ministerios y organismos que tienen tambi¨¦n tareas de defensa. En este sentido, haciendo un c¨®mputo homologable al de otros pa¨ªses europeos, habr¨ªa que incluir en el presupuesto de Defensa desde el destinado a la Direcci¨®n General de la Guardia Civil, que pertenece al Ministerio del Interior pero que depende del ministro de Defensa, hasta las clases pasivas de car¨¢cter militar.
Dentro de los gastos que el Estado realiza anualmente a trav¨¦s de sus ministerios y organismos aut¨®nomos, uno de los cap¨ªtulos m¨¢s importantes cuantitativamente es el correspondiente a la funci¨®n defensa.Aunque tradicionalmente esta funci¨®n ha sido equiparada al gasto exclusivo del Ministerio de Defensa, en realidad deben considerarse otros gastos correspondientes a diferentes ministerios u organismos con funciones propias de la defensa. En este sentido, una interpretaci¨®n homologable con los presupuestos de defensa de otros pa¨ªses incluir¨ªa, adem¨¢s del correspondiente al Ministerio de Defensa, los presupuestos de la Direcci¨®n General de la Guardia Civil (que pertenece al Ministerio del Interior, pero depende tambi¨¦n del ministro de Defensa), las clases pasivas de car¨¢cter militar, los organismos aut¨®nomos administrativos. del Ministerio de Defensa (que incluye al ISFAS), los organismos aut¨®nomos comerciales, industriales y financieros del Ministerio de Defensa (Servicio Militar de Construcciones, etc¨¦tera) y el Patronato de Viviendas de la Guardia Civil.
Incluir¨ªa tambi¨¦n los fondos directos que los Presupuestos Generales del Estado asignan a empresas estatales o del INI, cuya producci¨®n es estrictamente militar, como es el caso, en 1985, de la E. N. Baz¨¢n.
En base a estas consideraciones, el presupuesto global de Defensa para 1985 asciende a 955.946 millones de pesetas, cantidad que excede en un 54% a la de contabilizar ¨²nicamente el presupuesto del Ministerio de Defensa. Esta cantidad supone igualmente un 3,4% del producto interior bruto del pa¨ªs, seg¨²n la previsi¨®n oficial de un aumento del 3% del PIB y del 7% de la inflaci¨®n para 1985.
Del total asignado al Ministerio de Defensa (618.631 millones de pesetas), un 53% procede de la ley 44/82 de Dotaciones Presupuestarias para Inversiones y Sostenimiento de las Fuerzas Armadas (ley de Dotaciones), lo que equivale a un total de 328.002 millones de pesetas. De esta cantidad, 25.556 millones corresponden a gastos de personal; 95.584 millones, a bienes y servicios, y 199.417 millones, a inversiones reales.
Dentro del presupuesto del Ministerio de Defensa, un 30% corresponde a los servicios de apoyo (apoyo log¨ªstico al personal y al material), otro 30% a las Fuerzas Armadas (fuerzas operativas y fuerzas en reserva), un 22% a la potenciaci¨®n y modernizaci¨®n, un 13,5%, a la administraci¨®n general y un 4,4% a la formaci¨®n y perfeccionamiento del personal.
17;5% para modernizaci¨®n
Por Ej¨¦rcitos, estas subfunciones est¨¢n distribuidas de forma sustancialmente diferente. As¨ª, el grueso del presupuesto del Ej¨¦rcito de Tierra est¨¢ repartido entre las fuerzas operativas (31,4%) y, en menor medida, el apoyo log¨ªstico al material (18,7%) y al personal (14,2%), dedicando s¨®lo el 17,5% a la potenciaci¨®n y modernizaci¨®n. La Armada, por el contrario, centra su presupuesto en la potenciaci¨®n y modernizaci¨®n (35,6%) y, en menor medida, a las fuerzas operativas (20,5%) y apoyo log¨ªstico al material (20,5%). El Ej¨¦rcito del Aire tiene el presupueste, m¨¢s repartido, dedicando una cuarta parte (25,6%) a las fuerzas operativas, otra (25,2%J al apoyo log¨ªstico al material, una quinta parte (21,1%) a la potenciaci¨®n y modernizaci¨®n y otra (19,3%) a la administraci¨®n general.
Una primera lectura, y en s¨ªntesis, del presupuesto por subfunciones permite afirmar que los gastos en fuerzas operativas son prioritarios en el Ej¨¦rcito de Tierra, la potenciaci¨®n y modernizaci¨®n es prioritaria en los presupuestos de la Armada, el apoyo log¨ªstico al personal est¨¢ absorbido por el ¨®rgano Central y el Ej¨¦rcito de Tierra, el apoyo log¨ªstico al material est¨¢ m¨¢s repartido entre los tres Ej¨¦rcitos y que los gastos de formaci¨®n del personal tienen una incidencia importante en el Ej¨¦rcito de Tierra y en la Armada.
En conjunto, el Ej¨¦rcito de Tierra absorbe el 40,2% del presupuesto del ministerio; la Armada, el 24,3% el Ej¨¦rcito del Aire, un 18,7%, y el ?rgano Central, un 1,2%. La preponderancia del Ej¨¦rcito de Tierra, a nivel cuantitativo, es, pues, todav¨ªa abrumadora. Ello es debido, principalmente, al peso espec¨ªfico que los gastos de personal tienen en el Ej¨¦rcito de Tierra, dado el elevado n¨²mero de militares que en ¨¦l est¨¢n encuadrados.
Aumento de las inversiones
Para el conjunto del Ministerio de Defensa, las retribuciones del personal suponen 299.980 millones de pesetas, lo que supone el 48,5% del total del presupuesto; los gastos en bienes y servicios absorben el 15,6%, y las inversiones reales, el 33,7%, con lo que se consolida la tendencia de disminuir los dos primeros cap¨ªtulos y aumentar la participaci¨®n de las inversiones reales en el total del presupuesto militar.
Los gastos de compra de bienes y servicios ascienden, en el presupuesto de 1985, a cerca de 100.000 millones de pesetas, esto es, a una tercera parte de los gastos de personal. De esta cantidad, algo m¨¢s de la mitad corresponde a la compra de material y suministros, cerca de un 42% a la reparaci¨®n y conservaci¨®n de bienes y un 6,4% a indemnizaciones. Un 10% del total de este cap¨ªtulo de compra de bienes y servicios est¨¢ destinado al vestuario de la tropa (9.662 millones de pesetas).
El cap¨ªtulo m¨¢s interesante de los presupuestos del Ministerio de Defensa es, sin embargo, el correspondiente a las inversiones reales, formado b¨¢sicamente por las adquisiciones de material b¨¦lico, tanto en el interior como en el exterior del pa¨ªs.
Las inversiones reales del Ministerio de Defensa para 1985 ascienden a 208.384 millones de pesetas, con un incremento del 13,4% sobre las de 1984. De esta cantidad, un 73,2% son nuevas inversiones, y el resto, inversiones de reposici¨®n.
Este volumen de inversiones absorbe el 44% del total de inversiones del Estado, indicador m¨¢s que suficiente para mostrar la decisiva importancia del Ministerio de Defensa en la actividad inversora del Estado o, dicho de otro modo, la centralizaci¨®n de las inversiones del Estado en actividades militares.
En 1985 es especialmente destacable el incremento experimentado por el mando de material del Ej¨¦rcito del Aire (49.102 millones de pesetas en inversiones), con un aumento del 41,5% respecto a 1984, mientras que han disminuido las inversiones de la Direcci¨®n General del Ejercito de Tierra (-4,8%) y de la Direcci¨®n General de Construcciones Navales Militares (-6,2%).Construcciones navales
Cuantitativamente, el Volumen m¨¢s importante de inversiones est¨¢ destinado a construcciones navales, con 66.399 millones de pesetas, seguido de material para el Ej¨¦rcito del Aire, con 49.102 millones, y para el Ej¨¦rcito de Tierra (48.558 millones de pesetas)
La importancia de estas invensiones en el conjunto realizado por el Estado es, como ya se ha mencionado, muy importante. A t¨ªtulo comparativo, y para mostrar las prioridades que a nivel estatal se conceden a diferentes actividades sociales, se?alaremos que las inversiones del Ministerio de Defensa son m¨¢s de cinco veces superiores a las inversiones que el Estado dedica a infraestructura de transportes, 22 veces superiores a las que dedica a instituciones penitenciarias, 43 veces superiores a las inversiones de todo el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n, 30 veces superior a las inversiones de todo el Ministerio de Cultura, 126 veces superior a las inversiones de todo el Ministerio de Sanidad y Consumo, 377 veces superior a las inversiones de la Direcci¨®n General del Medio Ambiente y 496 veces superior a la Direcci¨®n General de la Protecci¨®n Civil, para poner algunos ejemplos.
Este elevado volumen de inversiones, adem¨¢s, tiene garantizada una permanente evoluci¨®n al alza gracias a una ley aprobada en 1982: la ley de Dotaciones ya mencionada.
En resumen, la ley establece la garant¨ªa de que los presupuestos del Ministerio de Defensa crecer¨¢n, para el per¨ªodo 1983-1990, en una media anual del 2,5% en t¨¦rminos reales. Prev¨¦ tambi¨¦n que el aumento anual medio de la parte correspondiente a inversiones y sostenimiento ser¨¢ de un 4,432% en t¨¦rminos reales.
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