Los cancilleres de Contadora intentan impulsar el plan de paz para Centroam¨¦rica
ENVIADO ESPECIALEl Grupo de Contadora celebra su segundo aniversario con una nueva reuni¨®n en Panam¨¢ que nada tiene de conmemorativa. Desde ayer, los cuatro cancilleres que integran el grupo tratan de reflotar una negociaci¨®n que en los dos ¨²ltimos meses naveg¨® a la deriva. Su prop¨®sito es conciliar el acta de paz elaborada en septiembre con las observaciones que presentaron cuatro pa¨ªses centroamericanos (todos los afectados, menos Nicaragua), sin que ello obligue a replantear el debate desde el comienzo.
Para algunos observadores se trata de una misi¨®n imposible, sobre todo teniendo en cuenta que varios gobiernos de la regi¨®n pretenden que el tratado de paz sea compatible con la realizaci¨®n de maniobras militares conjuntas con ej¨¦rcitos extranjeros. Esta f¨®rmula ha permitido de hecho al Pent¨¢gono mantener durante los ¨²ltimos a?os una presencia militar constante en Honduras sin necesidad de instalar bases estables. Ello entrar¨ªa en abierta contradicci¨®n con el esp¨ªritu de Contadora, que basa la paz en la ausencia de ingerencias militares for¨¢neas.
La dificultad del empe?o no impide que los cancilleres de Contadora se encuentren "razonablemente optimistas". No en balde han superado durante estos dos a?os crisis m¨¢s graves que pusieron a Centroam¨¦rica al borde de la guerra. La f¨®rmula que parecen haber ideado ahora para superar el estancamiento es la de considerar individualmente las enmiendas que cada gobierno present¨® antes del 15 de octubre, seg¨²n el calendario previamente aceptado por todos, y dejar de lado el documento conjunto que elaboraron cuatro pa¨ªs en Tegucigalpa.
Este ¨²ltimo documento, firmado el 20 de octubre por los cancilleres de Costa Rica, el Salvador y Honduras y el vicecanciller de Guatemala, es incompatible -a juicio de varios diplom¨¢ticos vinculados al Grupo de Contadora- con el acta de paz "porque supone una ruptura en el equilibrio alcanzado en los diversos cap¨ªtulos". Sobre esa base, que responde en gran medida a los planteamientos norteamericanos, no se puede progresar,ya que un nuevo texto apoyado en el documento de Tegucigalpa se enfrentar¨¢ inevitablemente al rechazo de Nicaragua, ¨²nico pa¨ªs que acept¨® el acta de paz en su versi¨®n final.
Contactos individuales
La diplomacia de Contadora se ha encaminado en los dos ¨²ltimos meses a mantener contactos individuales con cada uno de los gobiernos enmendantes, a fin de conocer sus prioridades y, en cierta forma, romper el frente de Tegucigalpa. Estas reuniones han permitido determinar que algunas de las modificaciones m¨¢s sustanciales planteadas en la capital hondure?a, sobre todo en materia de seguridad, son consideradas accesorias por algunos de los firmantes.A partir de esta convicci¨®n se ha establecido un paquete de preocupaciones comunes a todos ellos y otro de enmiendas particulares. Con este deslinde inicial, el Grupo de Contadora cree que puede revisarse el acta sin necesidad de regresar a los inicios.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.