Exportan la empresas

Una de las caracter¨ªsticas m¨¢s relevantes de los pa¨ªses avanzados consiste en su enorme integraci¨®n econ¨®mica en el concierto mundial. Se trata, seg¨²n el presidente de la patronal CEOE, de econom¨ªas muy abiertas, cuyo dinamismo y progreso han tenido como aliado m¨¢s firme la elevada y creciente presencia en los mercados internacionales. Una presencia -dice- que se cimenta con solvencia d¨ªa a d¨ªa y que, por tanto, se sostiene en gran medida con independencia de las fluctuaciones coyunturales en la evoluci¨®n de los intercambios.

Son muy alentadores, ciertamente, los datos que nos llegan sobre la gran expansi¨®n que han registrado las exportaciones espa?olas en el pasado a?o. Se ha puesto de man¨ªfiesto, lo que no es nuevo, la capacidad de las empresas espa?olas para aprovechar circunstancias favorables, como el alza del d¨®lar y el mayor dinamismo del comercio mundial, y para buscar nuevas salidas ante una demanda interna deprimida, de manera que nuestras exportaciones han aumentado a un ritmo superior a la media de otros pa¨ªses.Pero autocomplacerse en unas cifras ser¨ªa tan peligroso como dar por ganada una batalla que pr¨¢cticamente no ha hecho m¨¢s que comenzar. Espa?a necesita mantener durante los pr¨®ximos a?os un ritmo exportador fuerte y sostenido, que deber¨¢ hacer compatible con una demanda interna previsiblemente algo m¨¢s entonada y a sabiendas de que los mercados ex teriores ni se han presentado ni se presentan precisamente como un camino de rosas, sino lleno de dificultades y competencia cada vez m¨¢s agresiva. Y necesita exportar m¨¢s por dos motivos fundamentales. En primer lugar, porque debe ser un motor protagonista para la recuperaci¨®n de la producci¨®n y el empleo, un pilar b¨¢sico de la de manda para las empresas. Tenemos que llegar a considerar como normal, como en la mayor¨ªa de los pa¨ªses europeos, que una empresa con 20 o 30 trabajadores planifique su producci¨®n de forma que una buena parte de la misma se canalice hacia otros mercados. Si en la actualidad las exportaciones representan en torno al 15% del producto interior bruto, deber¨ªa fijarse la meta del 25% en un horizonte no muy lejano, nivel asequible y comparable con varios pa¨ªses desarrollados.

La competitividad

Pero este objetivo, u otros que se fijen, no se consigue con meros voluntarismos o esperando la llamada a nuestras puertas de posibles compradores extranjeros. Exportar significa, ante todo, competitividad. Es la ¨²nica arma eficaz para encontrar un espacio creciente en un contexto internacional que se presenta con retos muy dif¨ªciles. Quiero resaltar tres: la enorme competencia de los llamados nuevos pa¨ªses industriales, que, por su gran flexibilidad, alta tecnolog¨ªa incorporada y mano de obra barata, acaparan parcelas crecientes en manufacturas de alto consumo; al otro lado tenemos un conjunto de pa¨ªses muy poderosos, cuya ventaja relativa se halla en el avance tecnol¨®gico, y en este contexto, Espa?a aspira a integrarse en la CEE en un futuro cercano, con todas las consecuencias de reducciones arancelarias generalizadas tambi¨¦n con terceros pa¨ªses.

Para hacer frente a esos retos, la estrategia a seguir puede plasmarse en un doble plano de actuaci¨®n, uno de car¨¢cter general, tendente a lograr la necesaria flexibilizaci¨®n del sistema econ¨®mico, la creciente moderaci¨®n en los costes, el fomento eficaz de la inversi¨®n e innovaci¨®n tecnol¨®gica y, por ¨²ltimo, la ineludible contenci¨®n del gasto y de la presi¨®n fiscal del sector p¨²blico. En esta direcci¨®n apunta decididamente la mayor¨ªa de los pa¨ªses industriales, de manera que cabe hablar, por primera vez en muchos a?os, de un aut¨¦ntico proceso de convergencia en las pol¨ªticas econ¨®micas. En nuestro pa¨ªs no s¨®lo debemos caminar por esa senda, sino hacerlo m¨¢s de prisa, si queremos ser tambi¨¦n m¨¢s competitivos y ganar nuevas cuotas de mercado. En este sentido, el Acuerdo Econ¨®mico y Social (AES) proporciona, sin duda, suficientes elementos alentadores, siempre que las m¨²ltiples comisiones creadas para hacerlo operativo funcionen con agilidad y eficacia.

Intereses comunes

En otro plano m¨¢s espec¨ªfico, resulta necesario complementar las mencionadas l¨ªneas de actuaci¨®n con apoyos decididos de tipo t¨¦cnico, comercial, financiero y fiscal a la exportaci¨®n. Se cuentan por centenares los empresarios que podr¨ªan dar testimonio desde estas p¨¢ginas del calvario que padecen de tr¨¢mites administrativos, homologaciones t¨¦cnicas, seguros, fletes, financiaci¨®n y un sinf¨ªn de formalidades y problemas que se esconden discretamente detr¨¢s de las aireadas estad¨ªsticas de aduanas. Creo que existe, o al menos debiera existir, una confluencia entre los intereses empresariales y los objetivos de los poderes p¨²blicos para que nuestra presencia en los mercados exteriores no sea s¨®lo ni b¨¢sicamente una salida a excedentes ocasionales, sino algo enraizado con la firmeza que permite ofertar siempre con la mayor seriedad y solvencia lo que exige el respaldo ¨¢gil y eficaz de las ¨ªnstituciones, organizaciones y empresas ligadas directa o indirectamente a la actividad exportadora, desde el Instituto Nacional de Fomento a la Exportaci¨®n (INFE) al Ministerio de Econom¨ªa y sus agregados comerciales, desde las c¨¢maras de comercio a todas las organizaciones empresariales, compa?¨ªas de trading financieras, aseguradoras, etc¨¦tera.

La cumbre exportadora que se celebrar¨¢ los proximos d¨ªas 22 y 23 de enero ha sido organizada por Confederaci¨®n Espa?ola de Organizaciones Empresariales (CEOE), la Asociaci¨®n para el Progreso de la Direcci¨®n, c¨¢maras de comercio e INFE, y cuenta con el patrocinio de la Secretar¨ªa de Estado de Comercio. Sin duda, se presenta como un acontecimiento de extraordinario relieve, porque es fiel exponente deuna inquietud general y significa la unificaci¨®n institucional de esfuerzos para conseguir que sean cada vez m¨¢s los pueblos y las gentes que consuman nuestros productos y hagan uso de nuestros servicios.