Sanguinetti afirma que la dictadura no volver¨¢ a Uruguay

Julio Mar¨ªa Sanguinetti, ganador de las elecciones celebradas el pasado 25 de noviembre, jur¨® ayer como presidente constitucional de Uruguay. Fueron testigos de la ceremonia medio millar de personalidades -ocho jefes de Estado y de Gobierno entre ellas- llegadas de los cuatro puntos cardinales del globo para asistir a la entrada de El Paisito en la democracia. "Esta Rep¨²blica, que naci¨® para la democracia, ha vivido 11 a?os de gobierno de facto, y ello no ocurrir¨¢ m¨¢s", dijo Sanguinetti en el atestado hemiciclo del Parlamento urguayo.

Seguro de s¨ª mismo, sin leer una sola l¨ªnea, Sanguinnetti reafirm¨® ante senadores, diputados y representantes de 72 delegaciones su compromiso de defender la democracia reci¨¦n recuperada por el pa¨ªs. "En todos los casos, toda nuestra voluntad y energ¨ªa va a estar volcada a ese objetivo supremo", dijo. "Esta Rep¨²blica, que naci¨® para la democracia, ha vivido 11 a?os de Gobierno de facto, y ello no ocurrir¨¢ m¨¢s"."En unos minutos asumir¨¦ el mando supremo de las fuerzas armadas", que, dijo, "si han ocupado el poder de la naci¨®n, ahora van a defender la Constituci¨®n", palabras que fueron acogidas con una gran ovaci¨®n en el hemiciclo.

"Para los uruguayos la democracia es una verdad de destino", se?al¨® m¨¢s adelante recordando a Ortega y Gasset para quien tal tipo de verdad "es la que no se discute sino que se asume", manifest¨® el presidente uruguayo.

Tras reconocer las dificultades que le aguardan por delante al pa¨ªs, Sanguinnetti concluy¨® su intervenci¨®n con un canto a la esperanza y a la solidaridad. "Hoy, atravesados los laberintos de la soledad, nos encaminamos hacia una nueva etapa de cooperaci¨®n y de solidaridad con todos los pueblos del mundo, aqu¨ª representados por los mandatarios y estadistas que nos acompa?an".

Sanguinetti, cumpli¨®, apenas unos minutos despu¨¦s de su toma de posesi¨®n, una de las las promesas electorales, al decretar la rehabilitaci¨®n de todas las fuerzas pol¨ªticas y sindicales proscritas por la dictadura. El caso m¨¢s relevante de estas medidas, es la legalizaci¨®n del Partido Comunista de Uruguay, alineado dentro de la Coalici¨®n Izquierdista Frente Amplio, seg¨²n da fuerza opositora.

Uno de los primeros problemas con que se ha de enfrentar la renacida democracia uruguaya, adem¨¢s del de la grave crisis econ¨®mica, a la que se refiri¨® en su discurso Sanguinetti, es el recortar los actuales efectivos de las Fuerzas Armadas. Juan Chiarino, presidente de la conservado la Uni¨®n C¨ªvica y ministro de Defensa in p¨¦ctore, asegur¨® ayer que ser¨¢n reducidos los 70.000 profesionales que integran el Ej¨¦rcito uruguayo. El primer paso significativo de la pol¨ªtica militar del Gobierno de Julio Mar¨ªa Sanguinetti ser¨¢ la confirmaci¨®n en su cargo del comandante en jefe del Ej¨¦rcito, teniente general Hugo Medina.

Pactos previos a las elecciones democr¨¢ticas suscritos en el Club Naval de Montevideo entre las fuerzas armadas y los partidos Colorado, Uni¨®n C¨ªvica y la coalici¨®n de izquierdas Frente Amplio establecieron la garant¨ªa castrense de que los jefes de las tres armas permanecer¨¢n en sus puestos hasta finales de este a?o.

No obstante, el general Hugo Medina dej¨® hace una semana estupefactos a los uruguayos declarando que si se volvieran a producir las circunstancias pol¨ªticas de 1973 los militares volver¨ªan a dar un golpe de Estado Vaya en honor de la verdad que el general Medina ha probado repetidas veces no saber expresarse en p¨²blico y que fueron los periodistas quienes, acorral¨¢ndole con sus preguntas, obligaron al jefe uruguayo a expresarse con sinceridad. Fue una torpeza m¨¢s que una provocaci¨®n. No obstante, la permanencia o no de los actuales comandantes en jefe indicar¨¢ el grado de tutelaje de las fuerzas armadas sobre la democracia renacida.

El debate sobre la amnist¨ªa

Muchos otros detalles confirman este tutelaje, como la imposibilidad de sancionar r¨¢pidamente la amplia amnist¨ªa pol¨ªtica o el hecho de que los dos jefes de la oposici¨®n, l¨ªderes de sus respectivos partidos y jefes de sus minor¨ªas parlamentarias, Wilson Ferreira (Partido Nacional) y general L¨ªber Seregni (Frente Amplio), no hayan podido ser legisladores ni puedan aparecer en el futuro inmediato en el Parlamento. Antes de finales de a?o la legislatura debe proceder a reformar la Constituci¨®n y hacerla sancionar en refer¨¦ndum; muchos esperan la ocasi¨®n de reparar la injusticia hist¨®rica cometida con los dos hombres que firmemente resistieron la dictadura, uno desde la c¨¢rcel, otro desde el exilio.

Respecto a la amnist¨ªa, el debate parlamentario ha quedado interrumpido en sus comienzos por los fastos de la toma de posesi¨®n de Sanguinetti. El Gobierno ha presentado al Parlamento un proyecto de pacificaci¨®n nacional, que excluye expl¨ªcitamente a los condenados por homicidios intencionales consumados, por los que fueron condenados en juicios irregulares -m¨¢s de 3.000 personas fueron sentenciadas durante la dictadura por los tribunales militares- muchos de ellos, tupamaros todav¨ªa en prisi¨®n. A pesar de ello, ayer Sanguinnetti manifest¨® ante el Parlamento su esperanza en que llegue a predominar un esp¨ªritu de pacificaci¨®n.

El presidente Sanguinetti, acaso forzado por el alud de votos derechistas aportados a su triunfo por el ex presidente Jorge Pacheco Areco, prepara un Gobierno fuertemente conservador.