B¨¦lgica anuncia su despliegue de euromisiles cuatro d¨ªas despu¨¦s de iniciarse las negociaciones de Ginebra

La primera bater¨ªa de 16 misiles de crucero estadounidenses de los 48 que correspondieron a B¨¦lgica en el reparto de 1979 ser¨¢ instalada antes de finales de mes en la base belga de Florennes. Cuatro d¨ªas despu¨¦s de iniciadas las conversaciones de Ginebra sobre control de armamentos, dos d¨ªas despu¨¦s de las exequias de Konstant¨ªn Chernenko y al cabo de m¨¢s de cinco a?os de la doble decisi¨®n de la OTAN de instalar en Europa 572 misiles de crucero y Pershing 2, el Gobierno de coalici¨®n que preside Wilfried Martens anunci¨® ayer ante el Parlamento su decisi¨®n de desplegar en el pa¨ªs los euromisiles.

Martens, seguramente a la espera de los debates parlamentarios del lunes, que desembocar¨¢n en el voto de una moci¨®n de confianza, no revel¨® la fecha exacta de este primer despliegue y se limit¨® a decir que el Gobierno belga "ha dado su acuerdo al despliegue inmediato de los 16 primeros misiles". La OTAN ha expresado su satisfacci¨®n por este anuncio, que pone fin a un largo per¨ªodo de incertidumbre.Martens, sin embargo, dej¨® una puerta abierta en relaci¨®n con los restantes 32 misiles que le corresponde desplegar seg¨²n la decisi¨®n de la OTAN de 1979, y ofreci¨® cuatro posibilidades: 1. Si a finales de 1987 (es la fecha tope prevista por la OTAN para el calendario de despliegue) contin¨²an las negociaciones de Ginebra, la decisi¨®n se demorar¨¢ seis meses, y una vez transcurrido este per¨ªodo sin que se llegue a ning¨²n acuerdo se proceder¨¢ autom¨¢ticamente a su instalaci¨®n. 2. Si las negociaciones fracasan antes, B¨¦lgica desplegar¨¢ seg¨²n el calendario previsto la parte convenida. 3. Si hay un acuerdo para la eliminaci¨®n de todos los misiles de alcance intermedio desaparecer¨¢ la necesidad del despliegue. 4. Si hay un acuerdo limitado, B¨¦lgica desplegar¨¢ la parte que le corresponda.

El Gobierno de coalici¨®n democristiano-liberal ha basado su decisi¨®n en tres factores. Primero consult¨® a la OTAN sobre un posible aplazamiento del primer despliegue, pero la OTAN, y especialmente los otros pa¨ªses que ya han desplegado, consideraron, seg¨²n Martens, que no conven¨ªa que B¨¦lgica rompiera la solidaridad atl¨¢ntica en estos "momentos cruciales", pues se debilitar¨ªa la credibilidad de la Alianza y la fuerza de la postura occidental en las negociaciones. En segundo t¨¦rmino, el ministro de Asuntos Exteriores, Leo Tindemans, ofreci¨® a su colega sovi¨¦tico, Andrei Gromiko -con ocasi¨®n de su encuentro en Mosc¨² a ra¨ªz de las exequias de Chernenko-, demorar la decisi¨®n deldespliegue si la URSS aceptaba desvincular en Ginebra un r¨¢pido progreso sobre los euromisiles de un avance en las negociaciones sobre armamento espacial, pues ¨¦stas llevar¨¢n a?os. La respuesta sovi¨¦tica fue negativa, al considerar todas estas armas como estrat¨¦gicas.

Finalmente, Martens present¨® su decisi¨®n dentro de un paquete que incluye medidas econ¨®micas y fiscales para los a?os venideros. De hecho, varios parlamentarlos protestaron por esto y por el hecho de que estas medidas se aplicar¨¢n despu¨¦s de las pr¨®ximas elecciones generales, previstas para el mes de diciembre.

Un portavoz de la OTAN declar¨® la satisfacci¨®n del organismo por la "valiente decisi¨®n belga, que refuerza la postura de la Alianza en estos momentos". Los grupos pacifistas se reunieron para discutir sobre la manifestaci¨®n de ma?ana, para la que en principio no esperaban, antes del anuncio, una participaci¨®n superior a las 50.000 personas (frente a las 400.000 de octubre de 1983).

La base de Florennes, situada unos kil¨®metros al sur de Bruselas, estaba lista desde hace d¨ªas para acoger estos primeros misiles, cuyas piezas sueltas, al parecer, estaban depositadas ya en la Rep¨²blica Federal de Alemania (RFA), cerca de la frontera con B¨¦lgica.

Martens insisti¨® en que estos misiles s¨®lo podr¨ªan ser disparados, tras las consultas pertinentes en la OTAN, para responder a una agresi¨®n, pero no para iniciarla. No obstante, el uso de los misiles de crucero est¨¢ plenamente en manos de Estados Unidos. No hay doble llave.

Al contrario que B¨¦lgica, Holanda a¨²n no ha tomado su decisi¨®n -la ha aplazado hasta el 1 de noviembre de este a?o-, que depender¨¢ del auge en el n¨²mero de cabezas de SS-20 desplegadas en Europa por la URS S. En los otros pa¨ªses que han de acoger euromisles -Reino Unido, RFA e Italia- hay ya 93 euromisiles operativos, seg¨²n los ¨²ltimos datos. El total del plan de la OTAN prev¨¦ entre 1983 y 1987 el despliegue de 464 misiles de crucero y 108 Pershing 2 en estos cinco pa¨ªses.

B¨¦lgica, como Holanda, subordin¨® en 1979 su decisi¨®n final al examen de la evoluci¨®n de las negociaciones. Pero la decisi¨®n fue demor¨¢ndose, especialmente por la divisi¨®n que reinaba sobre esta asunto en el Partido Democristiano Flamenco. El 21 de enero de este a?o, a su regreso de Washington, Martens tom¨® una primera decisi¨®n: el despliegue de los 48 misiles en B¨¦lgica antes de finales de 1987. Si no hab¨ªa acuerdo en Ginebra, a la vista de la ¨²ltima postura sovi¨¦tica, "no hay razones para retardar el despliegue de los primeros misiles de crucero", dijo ayer Martens, e insisti¨® en que la decisi¨®n no tiene car¨¢cter "ofensivo ni hostil".

El acuerdo en el seno del Gobierno sobre los misiles se retras¨®, pues qued¨® ligado a un acuerdo sobre los temas econ¨®micos. En la oposici¨®n ha sido sobre todo el Partido Socialista Flamenco el m¨¢s ferviente partidario de una moratoria en este despliegue, acompa?ado de una congelaci¨®n del actual nivel de armamentos de ambos bloques.