El lugar de los hechos

La elecci¨®n del Race Course Ground de Wrexham ha creado una gran pol¨¦mica. Pol¨¦mica, claro, por parte espa?ola, pues Mike England, seleccionador gal¨¦s, asegura que es un campo perfecto "donde los aficionados animan sin descanso de principio a fin. Igual que el p¨²blico de Sevilla". Mu?oz cree que el campo ha sido elegido por algo "pues ¨¦stos no se chupan el dedo. Habr¨¢ que ir con cautela".Lo cierto es que ¨¦ste es un estadio con solera, pues no hay que olvidar que fue en Wrexham donde, en enero de 1876, un grupo de entusiastas galeses se reunieron en el Wynnstay Arms Hotel para discutir la posibilidad de organizar un encuentro internacional de f¨²tbol contra Escocia. Fue en esa reuni¨®n donde se decidi¨® constituir la Football Association of Wales.

Es un t¨ªpico estadio brit¨¢nico a la vieja usanza, con 28.500 espectadores muy encima del terreno de juego, pero con detalles muy caseros y propios de un club de Cuarta Divisi¨®n -que es donde milita el conjunto local- como ¨¦se de la se?ora que aparece en la tribuna de prensa durante el descanso con una enorme tetera met¨¢lica para ir repartiendo el m¨¢s brit¨¢nico de los refrescos. England reconoce que para este encuentro prefiere este estadio que el tradicional de Cardiff con 40.000 espectadores. Todo parece indicar que el pr¨®ximo Pa¨ªs de Gales-Escocia se jugar¨¢ en Cardiff, donde puede lograrse una mayor recaudaci¨®n. Y es que los escoceses no son tan impresionables como los espa?oles. Aquellos est¨¢n acostumbrados a todo.

La federaci¨®n galesa ha conseguido una excelente recaudaci¨®n, por encima de los 61 millones de pesetas, ya que las entradas costaban 10 libras esterlinas (2.170 pesetas). Para los aficionados una barbaridad, pues un partido del campeonato ingl¨¦s cuesta, corno t¨¦rmino medio, cuatro libras (868 pesetas).