La producci¨®n final agraria crecer¨¢ el 1,3% en 1985

La producci¨®n final agraria en 1985 tendr¨¢ un incremento del 1,3% sobre el a?o anterior, seg¨²n los avances facilitados por el ministro de Agricultura, Carlos Romero. La contribuci¨®n del sector agrario al crecimiento del producto interior bruto en 1985 ser¨¢ de dos d¨¦cimas, mientras que hace un a?o super¨® el medio punto.

La producci¨®n agr¨ªcola crecer¨¢, al menos, el 1,7% sobre los valores obtenidos en la cosecha anterior, considerada como la m¨¢s grande del siglo, lo que significa que la agricultura mantendr¨¢ su contribuci¨®n, aunque algo menor, al crecimiento de la econom¨ªa espa?ola durante este a?o. La producci¨®n ganadera tendr¨¢ un crecimiento menor en este a?o, en torno al 0,7%, y los productos forestales tendr¨¢n un incremento del 2%. En conjunto, el sector agrario contribuir¨¢ con el 0,2% al crecimiento del producto interior bruto en este a?o.Las producciones finales del sector agr¨ªcola, que se concretan en casi 20 millones de toneladas de cereales para este a?o, se revisar¨¢n al alza en los pr¨®ximos dos meses si las condiciones climatol¨®gicas se mantienen. No obstante, la cosecha de cereales ser¨¢ algo inferior a la obtenida el a?o pasado. El ministro de Agricultura destac¨®, en una conferencia de prensa para presentar el avance del sector agrario, que los importantes logros en la cosecha de este a?o no se pueden reflejar autom¨¢ticamente en el ¨ªndice de precios al consumo porque s¨®lo una parte de estas producciones tienen una traducci¨®n inmediata sobre precios y porque el llamado componente alimentaci¨®n del ¨ªndice de precios al consumo es la suma de partidas distintas que en algunas ocasiones no tienen nada que ver en realidad con la evoluci¨®n de los precios de productos agrarios.

En este sentido se?al¨® el ministro que la subida m¨¢s fuerte de precios en el mes de abril se hab¨ªa registrado en el precio del tabaco, que tiene poco que ver con los precios en origen de los productos alimenticios ya que se trata de un precio regulado en el que el componente de impuestos indirectos es muy fuerte y puede desvirtuar claramente el ¨ªndice general del grupo. Carlos Romero volvi¨® a se?alar su convencimiento de que en el mes de julio los precios de los productos alimenticios estar¨¢n por debajo de los precios generales y que por lo tanto no se podr¨¢ culpar a la agricultura de los problemas que se produzcan en el mantenimiento de los objetivos de inflaci¨®n establecidos por el Gobierno.

Impulsar la demanda

Carlos Romero se?al¨® que se espera un ligero descenso en las producciones obtenidas en trigo y cereales pienso que se compensar¨¢n con mayores incrementos en los cereales cuya recoleci¨®n tiene lugar en oto?o, especialmente ma¨ªz y arroz. La cosecha de hortalizas ser¨¢ inferior a la obtenida el a?o pasado, como consecuencia de las heladas de principios de a?o, mientras que las frutas tendr¨¢n una cosecha compensada por la mayor cantidad de frutas frente a la disminuci¨®n de c¨ªtricos y el aumento de frutas de pepita y la almendra.El impacto positivo de la cosecha de este a?o, unida a la obtenida el a?o anterior no se puede limitar exclusivamente a la mejora de renta del sector, con ser importante y haber supuesto un incremento d¨¦ la renta monetaria del 20% el a?o pasado, sino que debe relacionarse con el tir¨®n de la demanda que en otros sectores industriales provoca de forma indirecta el aumento de la renta del sector.

En este sentido se se?ala que en el primer cuatrimestre del a?o en curso, y a consecuencia de la mayor acumulaci¨®n del sector, se est¨¢ produciendo un incremento de la demanda de bienes de, inversi¨®n y de consumo por parte de la agricultura que tiene claras repercusiones positivas sobre el resto de la econom¨ªa. En los cuatro primeros meses de este a?o la demanda de tractores ha crecido por encima del 10% y la venta de cosechadoras de cereales en casi un 70%.

La importante cosecha obtenida el a?o pasado y las previsiones para 1985 permiten, adem¨¢s, mantener los objetivos de cerrar el a?o con una balanza comercial agraria equilibrada o con un ligero super¨¢vit, como ocurri¨® en 1984. La cosecha de cereales ha reducido el nivel de importaciones de productos alternativos para la alimentaci¨®n animal, lo mismo que ha bajado claramente el volumen de oleaginosas a comprar en el exterior.

La balanza exterior agraria mantiene un saldo favorable de 23.000 millones de pesetas durante el primer trimestre de 1985, manteniendo la tendencia positiva iniciada, por primera vez en 20 a?os en 1984. Las exportaciones fueron de 183.000 millones de pesetas y las importaciones de 160.000 millones de pesetas.