'Ligosis'
FERNANDO CASTELL?
Psic¨®logos fronmmaniacos sexuales han comprobado que muchas mujeres deambulan por los grandes almacenes en un estado latente de predisposici¨®n psicol¨®gica al ligue. Incluso demuestran con estudios de campo de pluma que un mucho por ciento de adulterios femeninos y actos sexuales compulsivos se cometen a la salida de un gran almac¨¦n.Varios factores contribuyen a esa predisposici¨®n. Uno es que, como se puede ver mediante c¨¢maras de v¨ªdeo estrat¨¦gicamente dispuestas, la clientela, mientras recorre esos reinos de Jauja multicolores, parpadea mucho menos de lo normal y lleva las pupilas como panes, caracter¨ªsticas del estado hipn¨®tico. Y ya se sabe que una persona hipnotizada tiene el superYo (le la moral social y las costumbres bajo de guardia.
Otro factor concomitante es la m¨²sica ambiental que los pinchacocos oculto s intercalan sabiamente entre las invitaciones a viajar a Oriente Pr¨®ximo sin salir de la quinta planta. El hilo musical que se ofrece para que las se?oras se orienten entre el laberinto de cretona es del g¨¦nero Emmanuelle, Je t'aime, moi non plus, De vez en cuando a qui¨¦n no le gusta cambiar y T¨®mame o d¨¦jame. Otras tantas incitaciones subliminales al acto de compra suced¨¢neo de sus anhelos sexuales atizados, o al acto sexual mismo si ya est¨¢ muy cargado el saldo de la tarjeta de cr¨¦dito y hay alg¨²n miembro del sexo contrario (o no) a mano. El videoespionaje de probador muestra c¨®mo hasta la m¨¢s honesta ama de casa jadea en el acto de probarse prendas.
A estos factores convergentes m¨²sico-hipn¨®ticos se a?ade otro previo, y es que muchas se?oras acuden a los grandes almacenes, precisamente, a desublimar represivamente su depresi¨®n y sus frustraciones conyugales o cenobiales.
Los psic¨®logos no han estudiado el comportamiento ad hoc de los hombres, por considerar que ¨¦stos, como Jaimito, siempre est¨¢n pensando en lo mismo, aquejados de ligosis obsexiva. A lo sumo, han comprobado que cada vez hay m¨¢s se?ores apostados a la puerta de los grandes almacenes, como cazadores furtivos del Sexto en paciente actitud de aqu¨ª-te-espero.
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