El historiador recibi¨® la noticia en un cuartel de la Guardia Civil

, El historiador y economista Ram¨®n Carande recibi¨® la noticia del Premio Pr¨ªncipe de Asturias de Ciencias Sociales en el cuartel de la Guardia Civil del pueblo Almendral, situado a 30 kil¨®metros de Badajoz capital, hasta el que viaja a menudo para refugiarse en Capela, la finca familiar que le sirve de retiro.

A las pocas horas de enterarse de la buena nueva manifestaba: "Me siento hinchado como un globo porque no me cabe en el cuerpo tanta felicidad, satisfacci¨®n y gratitud. Pienso que tiene que haber muchas personas interesadas- por m¨ª para que me hayan tenido en cuenta a la hora de conceder este premio".

El jurado, a la hora de otorgar el galard¨®n, ha querido reconocer a Ram¨®n Carande el haber asentado las bases historiogr¨¢ficas de las ciencias modernas contempor¨¢neas, as¨ª como su destacada labor de investigaci¨®n en numerosas disciplinas.

El premio se fall¨® poco despu¨¦s del mediod¨ªa de ayer y el encargado de notificarlo al escritor fue el delegado del Gobierno en el Principado de Asturias, Obdulio Fern¨¢ndez, quien ante la imposibilidad de comunicarse con ¨¦l por tel¨¦fono llam¨® a la comandancia de la Guardia Civil de Almendral. Inmediatamente una pareja se desplaz¨® hasta la finca Capela para pedir al reci¨¦n galardonado que les acompa?ara hasta el pueblo porque "hab¨ªa un gobernador que ten¨ªa algo que decirle". Ram¨®n Carande en principio crey¨® que la misiva iba dirigida a su hijo, el tambi¨¦n escritor Bernardo V¨ªctor Carande, que en esos momentos se hallaba en la capital pacense.

El nuevo premio Pr¨ªncipe de Asturias, al que faltan dos a?os para cumplir los 100, comentaba humor¨ªsticamente que la distinci¨®n se la han concedido por su avanzada edad. "Yo no esperaba "esto a mis a?os, pero habr¨¢n pensado que soy un hombre a punto de marcharme y ¨¦sta es la mejor ocasi¨®n para reconocer mis m¨¦ritos".

Domicilio entra?able

Ram¨®n Carande recibi¨® a este peri¨®dico en Capela, cobijado entre las vetustas paredes del cortijo, al abrigo del t¨®rrido sol extreme?o y rodeado de cuadros y recuerdos. Es Capela, como afirma su hijo, su domicilio entra?able; el otro, el ciudadano, est¨¢ en Sevilla.

"Yo quiero", asegur¨® arrellan¨¢ndose en su sill¨®n habitual, "que conste una cosa porque la siento produndamente. Aparte del dinero que pueda representar este premio, que es una cantidad considerable, me congratula y me conmueve profundamente el que lleve el nombre de Pr¨ªncipe de Asturias, porque yo tengo una especial simpat¨ªa y admiraci¨®n por este joven entra?able, bell¨ªsimo y verdaderamente digno de un porvenir glorioso que beneficiar¨¢ a Espa?a".

El escritor, sonriente durante los breves minutos de la entrevista, cambi¨® el semblante para lamentarse de las limitaciones f¨ªsicas que le impone la edad. "Ahora es el aut¨¦ntico momento de la jubilaci¨®n. Cuando ya no puedo hacer nada y me pesan mucho las horas perdidas, porque me encuentro incapacitado para realizar una obra digna de tenerse en cuenta".