Un recluso se fuga de Carabanchel escondido en una caja de cart¨®n

Un recluso de 29 a?os se fug¨® en la ma?ana de ayer de la prisi¨®n de Carabanchel, tras introducirse en una caja de cart¨®n que un cami¨®n sac¨® del centro penitenciario. El fugado, Manuel Quero M¨¦ndez, casado, era un preso penado calificado de segundo grado o intermedio. Sus condenas terminaban dentro de 10 a?os. La fuga se produce tres d¨ªas despu¨¦s de que dos presos de ETA militar abandonaran la prisi¨®n de Martutene (Guip¨²zcoa) ocultos en los altavoces de un conjunto musical.Manuel Quero huy¨® escondido en una de las cajas que se emplean para sacar de la prisi¨®n las carpetas que los presos fabrican en los talleres. Los investigadores de la fuga presumen que, ayudado por otro interno, Quero se introdujo sin ser visto por los funcionarios en la caja, que fue precintada y subida a un cami¨®n junto con varias otras. La diferencia de peso entre unas carpetas de cart¨®n y el cuerpo de un adulto sugieren la existencia de complicidades entre los internos del taller.

Fuera de la prisi¨®n, en la calle del General Ricardos, el fugado rompi¨® la caja con unas tijeras que llevaba escondidas. Con el mismo instrumento, amenaz¨® al conductor del cami¨®n, al que despoj¨® de una camisa y dinero y oblig¨® a abandonar el veh¨ªculo, y escap¨®. El cami¨®n no hab¨ªa sido encontrado durante el d¨ªa de ayer.

Por otra parte, fuentes penitenciarias precisaron ayer que "las cajas de carpetas fueron cargadas por los reclusos del taller de imprenta en presencia de s¨®lo un funcionario de los destinados en ese departamento". La misma fuente asegur¨® que las cajas fueron introducidas en la furgoneta ya cerradas, en contra de lo establecido, puesto que todos los paquetes que se sacan de la c¨¢rcel deben ser cerrados en el exterior. La direcci¨®n del centro ha abierto una investigaci¨®n para determinar responsabilidades entre los funcionarios encargados de supervisar la salida de los trabajos de talleres.

El evadido cumpl¨ªa condenas por diversos delitos de robo, tenencia il¨ªcita de armas y lesiones. El subdirector de la prisi¨®n, Jos¨¦ Mar¨ªa Carrasco, tom¨® declaraci¨®n a los reclusos que se hallaban en los talleres, donde se fragu¨® la fuga y en las puertas por las que pas¨® el cami¨®n.