Un filme alem¨¢n y otro checo, premiados en el festival de Gij¨®n

Los jurados de ni?os y j¨®venes apenas coincidieron con los de adultos a la hora de decidir ayer cu¨¢les eran las mejores pel¨ªculas presentadas al XXIII Certamen Internacional de Cine para la Infancia y la Juventud, que se clausur¨® ayer por la tarde en Gij¨®n. Los premios recayeron en la pel¨ªcula checa No se debe jugar con los diablos, de Hynek Bocan, y en el filme Richy Guitart, de Michael Laux (RFA).El festival concluy¨® con la tradicional ceremonia de clausura en la que se dan a conocer las pel¨ªculas que m¨¢s han gustado a los distintos jurados. Al igual que en ocasiones anteriores hubo uno de 125 ni?os que otorg¨® el premio Platero, y otro compuesto por 125 j¨®venes que concedi¨® el premio Pelayo. Los jurados de adultos no otorgan galard¨®n, sino que recomiendan aquellos filmes que consideran de mayor calidad.

En esta ¨²ltima edici¨®n del festival, el premio Platero fue para la pel¨ªcula checa No se debe bromear con los diablos, dirigida por Hynek Bocan. El jurado de ni?os acord¨® conceder tambi¨¦n una menci¨®n especial al corto de Checoslovaquia titulado El topo en el sue?o, de Zdenek Miler.

El premio Pelayo correspondi¨® al filme de la RFA Richy Guitart, dirigido por Michael Laux. El jurado de j¨®venes concedi¨® tambi¨¦n una menci¨®n especial al corto El m¨²sico y la muerte, del checo Lubomir Benes.

A pesar de que las nacionalidades de los filmes premiados son distintas, salvo en dos casos -los cortos checos El m¨²sico y la muerte y El topo en el sue?o-, tanto mayores como peque?os parecen compartir un punto de vista: en los pa¨ªses del este de Europa se hace el mejor cine para ni?os. El jurado de adultos de la secci¨®n de j¨®venes hace constar esta impresi¨®n en el acta de sus recomendaciones finales.