Siete j¨®venes logran con sus ordenadores c¨®digos para desviar sat¨¦lites de EE UU
Siete j¨®venes prodigios de menos de 18 a?os han sido detenidos en el Estado de Nueva Jersey bajo la acusaci¨®n de "conspiraci¨®n para robar", por medio de los ordenadores que sus padres les regalaron por sacar buenas notas y para que les ayudaran con los deberes del colegio. Los siete hab¨ªan visto la pel¨ªcula War games (Juegos de guerra), pero no llegaron a penetrar en los ordenadores del Mando A¨¦reo Estrat¨¦gico, aunque s¨ª ten¨ªan los c¨®digos cifrados para cambiar la posici¨®n de los sat¨¦lites de comunicaciones, seg¨²n ha denunciado el fiscal del condado de Middlesex, Alan Rockoff.
Para algunos expertos en electr¨®nica, el caso demuestra la fragilidad de una sociedad basada en los ordenadores. Ya son 40 los Estados que han aprobado leyes contra el delito mediante ordenadores, y el Bur¨® Federal de Investigaci¨®n (FBI) tiene una fuerza especial de 300 agentes para luchar contra este crimen.
Rockoff afirma que algunos de los acusados utilizaron n¨²meros de tarjetas de cr¨¦dito robadas, que intercambiaban con otros colegas, para encargar con sus ordenadores detectores de radar, equipos de est¨¦reo y "miles de d¨®lares" en mercanc¨ªas usando un servicio de venta por ordenador. Tambi¨¦n han sido acusados de hacer llamadas gratis a larga distancia, algunas a Espa?a, y de tener en su poder c¨®digos cifrados que les permit¨ªan llamar al Pent¨¢gono. La polic¨ªa utiliz¨® uno de estos c¨®digos y se puso al tel¨¦fono un teniente general, que no se explicaba c¨®mo hab¨ªa podido ser localizado. En un caso, uno de los detenidos consigui¨®, penetrando en el ordenador de la compa?¨ªa telef¨®nica, que desapareciera la cuenta mensual del tel¨¦fono de su casa. La polic¨ªa le pregunt¨® a su padre si despu¨¦s de pagar el mes anterior 150 d¨®lares no le hab¨ªa sorprendido no pagar nada, y ¨¦ste dijo que pens¨® que era cuesti¨®n de suerte.
Desmentido de la AT&T
La American Telephone and Telegraph (AT&T), que posee y opera con sat¨¦lites de comunicaciones, ha dicho que no cree que los detenidos hayan podido acceder a sus sat¨¦lites, a cuyos ordenadores de control no se puede entrar desde la red p¨²blica telef¨®nica y donde las ¨®rdenes son chequeadas 24 horas al d¨ªa por operadores humanos.
El Pent¨¢gono tambi¨¦n ha desmentido que hayan logrado datos secretos. Los siete j¨®venes, que afirman que no han hecho nada ilegal y que se limitaban simplemente a intercambiar informaci¨®n, ser¨¢n juzgados por un tribunal de menores. Sus defensores afirman que si s¨®lo se limitaban a almacenar informaci¨®n en sus ordenadores, que no utilizaban criminalmente, han podido ser violados sus derechos de libertad de informaci¨®n, protegidos por la enmienda primera de la Constituci¨®n.
"Esto es una hidra", ha dicho Rockoff. "Tenemos un genio electr¨®nico, que es el propio ordenador, que da a la mente humana la oportunidad para robar y lograr acceso a la propiedad ajena". Existe un nombre intraducible en EE UU para describir a estos piratas electr¨®nicos: hackers. Se calcula que hay entre 20.000 y 30.000.
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