Un tratado de extradici¨®n con limitaciones

El tratado de extradici¨®n que ma?ana firmar¨¢n en Londres Fernando Ledesma, ministro de Justicia espa?ol, y su hom¨®logo brit¨¢nico, Leon Brittan, no podr¨¢ ser aplicado a delincuentes de nacionalidad brit¨¢nica establecidos en Espa?a con anterioridad a la fecha de entrada en vigor del tratado mientras que no abandonen Espa?a. Tan s¨®lo si abandonan Espa?a y pretenden regresar ser¨ªa posible su detenci¨®n y supuesta extradici¨®n futura.

De esta manera, el centenar de delincuentes brit¨¢nicos que residen en Espa?a, fundamentalmente en la Costa del Sol y otras zonas tur¨ªsticas, no ver¨¢n su situaci¨®n modificada, siempre y cuando no abandonen moment¨¢neamente el suelo espa?ol.

No obstante, Fernando Ledesma se?al¨® recientemente que estos delincuentes ser¨¢n perseguidos "con todo rigor" a trav¨¦s de la ley de extranjer¨ªa, que entrar¨¢ en vigor el pr¨®ximo d¨ªa 23.

Vac¨ªo de siete a?os

Fuentes del Ministerio de Justicia se?alaron que con el nuevo tratado se llena un vac¨ªo de siete a?os que ha permitido convertir a Espa?a en asilo preferente de delincuentes brit¨¢nicos. El actual tratado sustituye a otro de 1878, que fue derogado exactamente un siglo m¨¢s tarde, en 1978. Las causas de aquella derogaci¨®n se basaban en la falta de reciprocidad, que afectaba principalmente a Espa?a, seg¨²n las mismas fuentes.

En este sentido, Fernando Ledesma indic¨® que durante los 100 a?os de vigencia del anterior tratado "solamente en una ocasi¨®n se dio lugar a la entrega de un delincuente pedido al Reino Unido por Espa?a. Sin embargo, a la hora de hacerse efectiva la entrega a Espa?a no fue posible porque el extraditado hab¨ªa huido del territorio brit¨¢nico".

El Ministerio de Justicia ha resaltado la "gran celeridad con que se ha alcanzado un acuerdo entre ambos pa¨ªses". La rapidez del mismo es explicada en el ministerio "por las buenas relaciones entre ambos pa¨ªses tras el nuevo clima existente a partir del desbloqueo del contencioso de Gibraltar". Tras la firma del tratado, el texto normativo entrar¨¢ en fase de ratificaci¨®n parlamentaria en ambos pa¨ªses.

Fernando Ledesma mostr¨® recientemente su confianza en que por el procedimiento de urgencia las dos c¨¢maras parlamentarias espa?olas aprueben el tratado al principio del pr¨®ximo per¨ªodo de sesiones. De ah¨ª a su efectiva puesta en vigor pasar¨¢n cuatro meses y un d¨ªa, plazo preestablecido por el propio tratado.