Felipe Gonz¨¢lez asisti¨® al funeral por el vicealmirante Escrigas

El presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, asisti¨® ayer al solemne funeral por el vicealmirante Fausto Escrigas Estrada, director general de Pol¨ªtica de Defensa, asesinado en atentado terrorista el pasado lunes cuando se dirig¨ªa en autom¨®vil a su despacho oficial. El acto religioso se celebr¨®, por primera vez en este tipo de casos, en el patio de armas del Ministerio de Defensa. La viuda del marino fallecido, Mar¨ªa Flor Rodr¨ªguez Romero, y sus cuatro hijos -dos de ellos marinos- estuvieron presentes en la ceremonia, que se desarroll¨® sin ning¨²n tipo de incidentes y en un ambiente de gran serenidad.

El funeral se inici¨® a las diez de la ma?ana, con el traslado del f¨¦retro a pie desde el interior del ministerio a la parte central del patio, delante de un altar instalado para el acto. El ata¨²d, cubierto por una bandera espa?ola, fue portado a hombros de los generales Juan Dusmet y Julio Canales y seis jefes militares de distintas armas, todos ellos destinados en la Direcci¨®n de Pol¨ªtica de Defensa. Sobre el f¨¦retro fueron colocados la gorra de gala del vicealmirante y su bast¨®n de mando.A la derecha del altar, se situaron, en una primera fila, el presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez; el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Federico Carlos Sainz de Robles; el ministro de Defensa, Narc¨ªs Serra; el presidente del Consejo de Estado, Antonio Hern¨¢ndez Gil; el Defensor del Pueblo, Joaqu¨ªn Ruiz-Gim¨¦nez; y los cuatro miembros de la Junta de Jefes de Estado Mayor (JUJEM).

Tras ellos, figuraban dirigentes pol¨ªticos -como Jos¨¦ Mar¨ªa Benegas, del PSOE, y Jorge Verstrynge, de AP-, ex ministros de Defensa -como Alberto Oliart y Agust¨ªn Rodr¨ªguez Sahag¨²n-, el ex ministro de Exteriores Fernando Mor¨¢n y varios almirantes y generales -como el anterior jefe de Estado Mayor de la Armada, el jefe de la Divisi¨®n Acorazada y los jefes de la Guardia Civil y Polic¨ªa Nacional-, as¨ª como numerosos militares de los tres ej¨¦rcitos y autoridades del Ministerio de Defensa.

Dos hijos de uniforme

A la izquierda del altar, se s¨ªtuaron la viuda del militar asesinado y sus cuatro hijos -los dos marinos, Juan y Fausto, de uniforme y, tras ellos, un centenar de familiares y amigos de la familia, entre los que figuraba el almirante Manuel Mar¨ªa Manso Quijano, quien estuvo destinado en la Casa Real. La viuda, Mar¨ªa Flor Rodr¨ªguez, vestida de negro, sigui¨® toda la ceremonia con entereza.

Frente al altar y en la parte del patio m¨¢s pr¨®xima al paseo de la Castellana -cuyo lateral fue cerrado al tr¨¢fico durante el acto-, form¨® una compa?¨ªa de honores de la Armada, con banda y m¨²sica.

En la fachada del ministerio fueron colocados nueve tapices con los escudos de Espa?a y de los tres ej¨¦rcitos y, tras el altar, hab¨ªa diez coronas de flores enviadas por presidencia del Gobierno, Ayuntamiento de Madrid y diversos departamentos del Ministerio de Defensa.

Las seis banderas que hay a ambos lados de la puerta de entrada al ministerio estaban a media asta.

Una vez colocado el f¨¦retro frente al altar, escoltado por una escuadra de gastadores, a las 10.05 se inici¨® la misa, concelebrada por 10 sacerdotes, entre los que figuraba el provicario general castrense, Pablo Cabrera Arias. En su homil¨ªa, el provicario pidi¨® que todos acaben comprendiendo que el terrorismo no es un camino para alcanzar objetivo alguno.

Orden del M¨¦rito Naval

A las 10.30, el general Francisco Veguillas ley¨® el real decreto de concesi¨®n, a t¨ªtulo p¨®stumo, de la Gran Cruz de la Orden del M¨¦rito Naval, con distintivo blanco, al vicealmirante asesinado. La distinci¨®n fue depositada sobre el f¨¦retro, al igual que una corona de laurel. Seguidamente, se intepret¨® el Himno de Oraci¨®n, que concluy¨® con el disparo de una salva de fusiler¨ªa por parte de una secci¨®n de la compa?¨ªa de honores.

A las 10.42, el f¨¦retro fue sacado a hombros al lateral del paseo de la Castellana, y frente a ¨¦l desfilaron las tropas que rindieron honores. A las 10.50, y mientras el ata¨²d era introducido en un furg¨®n del Ayuntamiento de Madrid, el presidente del Gobierno y otras altas autoridades expresaron su condolencia a la viuda del vicealmirante Escrigas.

A lo largo del acto no se registr¨® ning¨²n incidente y, entre los comentarios hechos por diversos militares al t¨¦rmino de la ceremonia fueron varios los que coincidieron en considerar el atentado contra el vicealmirante Escrigas como el m¨¢s importante, debido al cargo clave que ocupaba, de los ¨²ltimos a?os.

El f¨¦retro fue trasladado al aeropuerto militar de Getafe, desde donde, a bordo de un C-212 Aviocar, fue llevado hasta El Ferrol (La Coru?a), ciudad natal de militar asesinado, mientras los fa miliares y varios militares viaja ban a esta ciudad en otro avi¨®n si milar.

Ya en El Ferrol, se ofici¨® otro funeral en la iglesia castrense de San Francisco, al que asistieron, seg¨²n Efe, el presidente de la Xunta y el delegado del Gobierno en Galicia, as¨ª como los capitanes generales de la regi¨®n y zona mar¨ªti ma, el l¨ªder conservador Manuel Fraga y numerosos civiles y militares que aborrataban la iglesia.

El cuerpo del vicealmirante fue inhumado en el cementerio municipal ferrolano.