Cerrado por vacaciones

Cuentan las viejas cr¨®nicas de la ¨¦poca que en el verano de 1957, primero en el que emit¨ªa TVE, la ausencia de personal con motivo del obligado descanso estival exigi¨® tomar la determinaci¨®n de no mantener la programaci¨®n durante agosto. Por este motivo, quien en aquel per¨ªodo conectara el aparato receptor bien hubiera podido haberse encontrado con el r¨®tulo de Cerrado por vacaciones.Los contenidos que suelen ocupar la progamaci¨®n de la televisi¨®n en los fines de semana suelen ser tres: la informaci¨®n, las retransmisiones deportivas y los espacios cinematogr¨¢ficos. La ausencia de contenidos de actualidad obliga, !in soluci¨®n alguna, a la realizaci¨®n, durante el verano, de espacios de bajo inter¨¦s donde es necesario inflar noticias con el ¨²nico af¨¢n de llenar.

En cuanto a las retransmisiones deportivas, la ausencia de acontecimientos importantes este a?o deja vac¨ªa la programaci¨®n de un espect¨¢culo cada vez m¨¢s ligado a la televisi¨®n. El pasado verano ol¨ªmpico salv¨® a muchos del, en ocasiones, tedioso descanso.

Por ¨²ltimo, los programas cinematogr¨¢ficos parecen reservar para el verano lo peor de los paquetes de pel¨ªculas adquiridos. El resumen no puede ser m¨¢s desolador. Si nuestra televisi¨®n resulta en general aburrida, en verano lo es mucho m¨¢s. Si en agosto alcanza su nivel de inflexi¨®n m¨¢s bajo, en los fines de semana quiz¨¢ pueda recuperarse aquel viejo r¨®tulo de Cerrado por vacaciones.